MÁS doméstica no puede ser la noticia que protagonizan dos elementos sevillanísimos, el Alcázar y Temas sevillanos, ese invento de Antonio Bustos con el que se divulgan todos los palos de la sevillanía entre una concurrencia talludita y entrañable. Temas sevillanos es un ciclo de lecciones más o menos magistrales que sirve de motor de vida para un hombre tan entusiasta como Antonio y de entretenimiento pedagógico a un grupo de personas adultas que una vez al mes tenían la oportunidad de gozar de una sesión en el Alcázar. Así era hasta que llegó a la ciudadela Javier Landa como omnímodo hacedor. Y lo que antes era una vez al mes, ahora se queda en sólo apertura y clausura del curso. Bustos ha rogado, Landa se cierra en banda y todo se remata declarando a éste persona non grata. A ver qué daño le harán estos sevillanos al Alcázar...