Los vecinos pertenecientes a la Intercomunidad de Propietarios afectados por las obras del aparcamiento de Crucero Baleares, de los números 32 y 34 de la calle Manuel Arellano, en la Ronda de Triana de Sevilla, han interpuesto hoy un recurso contencioso-administrativo para tratar de resolver los problemas citados por la mencionada obra, dado que consideran que existe un riesgo para la estabilidad del edificio aledaño.

La portavoz de los vecinos, Concepción Sánchez, explicó a Europa Press que, tras el recurso de reposición previo interpuesto ante el Ayuntamiento de Sevilla instándole a una actuación y un acuerdo previo, finalmente se ha llegado a esta medida, bajo la asesoría legal del bufete de abogados Enrique Yrazusta.

Esta decisión ha venido motivada, según Sánchez, por el hecho de que a día de hoy la desviación del edificio 34 con respecto al 32 alcanza, a día de hoy, 47 milímetros hacia la derecha (Oeste) y 37 hacia el frente (Sur), lo que supone haber alcanzado el máximo permitido de desviación a partir del cual se pueden sufrir daños graves en la estructura del inmueble.

A pesar de ello, incidió la portavoz vecinal, "sólo tenemos un compromiso verbal del concejal de Movilidad, Francisco Fernández, realizado en una reunión con los residentes de reforzar los cimientos cuando esté finalizada la construcción del aparcamiento".

A día de hoy, añadió, la documentación de Geotecnia y Cimientos SA (Geocisa) sobre el comprometido estudio de las necesidades de consolidación que requiera el terreno aledaño al aparcamiento una vez concluya su construcción, así como informes de las empresas Vorsevi y Uriel y la garantía de reparar e indemnizar daños y perjuicios "no se han recibido".

Por su parte, el Consistorio defendió recientemente que la intención de Fernández es informar al Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo --con quien los vecinos se reunieron recientemente-- de "todos los trabajos que se han venido realizando con motivo de la construcción del aparcamiento de Crucero Baleares, asó como de las medidas de reforzamiento, mediciones y otras actuaciones de control que se han venido realizando en los edificios 32 y 34 de Manuel Arellano".

Además, el concejal del ramo informaría al Defensor de "la contratación de tres empresas independientes, Vorsevi, Uriel y Geocisa, que han realizado y determinaran no sólo el control en los movimientos del edificio, sino además las medidas que son necesarias adoptar para la consolidación de los edificios afectados, garantizando plenamente su seguridad".