Dulces, nacimientos y luces para animar la Navidad en Sevilla, la ciudad con más conventos después de Roma y la feria del belén más importante de España. Lo dice el Ayuntamiento de Sevilla en la campaña de publicidad que hace desde hace días en internet y también en la cartelería que se distribuye en estaciones y aeropuertos para vender la imagen de la ciudad.

Una Navidad "más real". Un mensaje subliminal que evita la imagen de los Reyes Magos (¿o eran vagos?) tomando el sol en Sevilla y, de paso, la polémica. Y que también refuerza una marca levantada sobre los pilares de la cercanía y la tradición. Es una forma de verlo. Para otros, detrás de esta estrategia de marketing, tradición es un mero sinónimo de rancio, por mucho mapping y tecnología que proyecte sobre la Casa Consistorial, que por cierto este año tendrá como hilo conductor a la patrona, la Virgen de los Reyes.

La Navidad, para el gobierno de Zoido, es una fiesta religiosa y para vivir en familia. Y por ello, desde el portal municipal, se ofrece como el mejor cicerone a una particular familia, los Giráldez, para que guíe a los visitantes en los recorridos más aventureros por la ciudad, más allá de Isla Mágica. Claro que todavía cuentan sólo con poco más de 130 seguidores en las redes. No obstante, la mejor guía será un calendario de actividades que está todavía editando la delegación municipal de Turismo, en colaboración con Fiestas Mayores, y que recogerá un amplio abanico de propuestas para disfrutar cada uno de los días de la Navidad, desde el puente de la Inmaculada. O de la Constitución.

Será en estas fechas, al parecer el 6 de diciembre, cuando el alcalde apriete el botón del encendido navideño que, por segundo año consecutivo y con menos dinero, según se apunta desde el gobierno local, sorprenderá a sevillanos y turistas. ¿Cómo? El equipo del PP todavía sigue negociando con patrocinadores, por lo que aún es secreto de sumario. Los vecinos del centro ya sueñan con cañones para que la nieve, artificial, no sea sólo una ilusión óptica en la fachada plataresca de la Plaza de San Francisco. Pero no está confirmado.

El gobierno municipal parte del convencimiento de que, un año más, la Navidad de Zoido dará que hablar. Y por ello repite la fórmula, después de haber paseado con nota alta el test el año pasado: las visitas subieron más de un 5% y, aunque es difícil de cuantificar, las luces y el mapping mejoraron considerablemente también la percepción ciudadana sobre la gestión del nuevo gobierno local. Rentabilidad asegurada, piensan en el PP.

De momento, mientras los operarios terminan de instalar las luces sorpresa de esta Navidad, dentro de la campaña We love people el Ayuntamiento ya ha iniciado su campaña turística en el aeropuerto de Sevilla, donde se ha renovado totalmente la cartelería de bienvenida, y las estaciones de tren. En Atocha, nada más bajar del AVE, se ven los primeros mupis de la Navidad "más real". Hasta 200 hay repartidos por la capital y también se están desarrollando acciones en Valladolid, por ejemplo. El año pasado, sin contar los días claves de las fiestas navideñas, en diciembre se alojaron en los hoteles sevillanos 133.578 personas, lo que supuso casi un 5% más que el año anterior. Y se registró una subida superior al 13% de turistas nacionales que, como los Giráldez, buscan dulces de convento, belenes y villancicos. Al menos eso supone el gobierno local.