El juez Javier González, que preside el jurado popular encargado de enjuiciar el presunto cohecho en Camas, ha decidido este miércoles suspender hasta mañana a las 10:00 horas la vista oral al sufrir una crisis de ansiedad el empresario Eusebio Gaviño, uno de los principales encausados que entregó a la ex edil Carmen Lobo un sobre con 12.000 euros como una parte del supuesto pago para que votara a favor de determinadas propuestas en varios Plenos municipales.

Aunque en un principio se barajó la posibilidad de que la vista se reanudara esta misma mañana sin la presencia de Gaviño para continuar escuchando las grabaciones que realizaron los denunciantes, Carmen Lobo y Francisco Gordo, el magistrado decidió finalmente aplazar la sesión hasta este jueves, a la espera de que mejore el estado de salud del supuesto intermediario y todo ello para preservar la “unidad de actos” que debe regir el proceso. Eusebio Gaviño ha salido esta tarde del hospital, donde se le han realizado pruebas complementarias, y se desconoce si mañana estará en condiciones de volver al juicio.

El incidente ha tenido lugar sobre las 09:30 horas, cuando iba a dar comienzo la segunda sesión del juicio, en la que tras escuchar algunas de las grabaciones, iban a declarar los cuatro acusados, incluido el propio Eusebio Gaviño. En un momento dado, el imputado, que según algunos testigos se hallaba muy nervioso y tenía un brazo y una pierna engarrotados, comenzó a sentirse indispuesto y se tumbó en el suelo, por lo que fue rápidamente asistido por las personas que se hallaban en el vestíbulo de la Sala de vistas y se alertó de inmediato al forense de los juzgados.

Pocos minutos después se personaban en las dependencias de la Audiencia de Sevilla efectivos del servicio de emergencias sanitarias del 061, que han continuado la asistencia al imputado y su traslado a un hospital sevillano.

No es la primera vez que Eusebio Gaviño sufre una crisis de ansiedad cuando acude a los juzgados, puesto que ya le ocurrió en el año 2006, cuando fue citado a declarar ante el juez en la fase de instrucción de la causa, lo que obligó a suspender esa comparecencia. En otra ocasión, en la que también debía comparecer ante el juez, presentó un nuevo parte médico indicando que seguía enfermo, con lo que no declaró hasta que fue citado en una tercera ocasión.