La primera plantilla del Cádiz CF llevó a cabo ayer sábado el último entrenamiento de la semana. Una sesión preparatoria que tuvo como escenario el estadio Nuevo Mirandilla, donde este domingo se cocina una permanencia que, si se quema, será un plato perdedor, tanto como bajar una categoría.

Desde la llegada de Mauricio Pellegrino al banquillo del conjunto gaditano, en los encuentros en casa no suele dar una convocatoria cerrada porque cita a todos sus efectivos antes de decidir en el mismo campo los que se visten de corto, así como el once inicial. Por lo tanto, este domingo todos los jugadores que están aptos deben presentarse en el Nuevo Mirandilla porque ahora mismo, titulares, suplentes y hasta lesionados, suman todos en favor de una causa que tiene mucho de ganar y del aspecto psicológico para tener a todos fuertes.

Los lesionados de las últimas semanas e incluso meses siguen fuera de combate porque se sabía que se había acabado el curso para ellos. El caso de Aiham Ousou es diferente porque lleva diez días con problemas en un tobillo que sí le han hecho 'caerse' del carro.

El zaguero está sin jugar cuando mayor es la carga en su demarcación hasta el punto de que Fali viene acabando los encuentros bajo mínimos y tiene poco margen para recuperarse antes de ser alineado. Sin Ousou y con la confianza con Momo Mbaye desaparecida en combate, la dupla valenciana (Fali y Víctor Chust) se está encargando de sacar las castañas del fuego porque, como se suele decir, no hay más cera que la que arde.

Existen otras demarcaciones dentro de la plantilla con mayor oxígeno a la hora de alinear a un futbolista u otro, si bien en el centro de la defensa toca tirar con Fali y Chust mientras ambos aguanten el tirón.En cuanto a la convocatoria, queda por ver una hora y media antes del choque de este domingo lo que hace Pellegrino, que en Sevilla se llevó a uno más que el día del Getafe porque decidió incluir a Nando, portero del segundo equipo.

Otra cuestión diferentes es el once, ya que sí existe margen en los extremos y en el ataque si el técnico argentino se decanta por oxigenar o apostar de inicio por futbolistas que vienen jugando menos. Todo ello dentro de una semana con la carga de tres encuentros, que no es poco a esta altura de temporada.