El pasado fin de semana, el municipio de Vélez-Málaga se vio envuelto en un torbellino gastronómico con la celebración de la Feria Sabor a Málaga en la calle Canalejas. Jesús Lupiáñez, alcalde de Vélez-Málaga, junto con Jesús María Claros, concejal de Agroalimentación, han ofrecido un balance "muy positivo" del evento.

Lupiáñez ha descrito el evento como un "éxito rotundo", destacando la masiva afluencia de visitantes y el impacto económico y social que ha generado en la ciudad. "Ha sido gratificante ver el centro de nuestra ciudad lleno de vida, de actividad, de comercio y de entusiasmo. Ahora ya los vecinos no dicen que Vélez está muerta, sino que Vélez necesita más bares y mayor restauración, y vamos a trabajar en este sentido", ha expresado el alcalde.

Los números han respaldado la afirmación de Lupiáñez. Según los datos proporcionados por los 34 stands participantes, las ventas han alcanzado los 98.000 euros en tres días. Claros ha destacado que el 100% de los productores desean repetir la experiencia el próximo año y ha elogiado la elección de la calle Canalejas como ubicación central del evento.

Además de las ventas directas, el edil ha comentado que el evento ha generado un impacto en los comercios locales, "comparado por algunos como días de Semana Santa debido a la afluencia y ventas". Los participantes en la feria han valorado la actitud y comportamiento de los visitantes con un 9,8 sobre 10, "lo que refleja el alto nivel de satisfacción".

Asimismo, Claros ha reconocido que aún existe margen para el crecimiento en la oferta de hostelería. Según sus observaciones, "durante los días de la feria, algunos bares y restaurantes contaban con largas filas". El edil también ha destacado las sinergias generadas entre los comercios locales, resaltando el respaldo y la satisfacción expresada por la Asociación de Empresarios de Vélez-Málaga.