El Tribunal Constitucional (TC) ha ordenado la reapertura de la causa instruida contra varios guardias civiles por delitos de detención ilegal, torturas y lesiones a un hombre tras el archivo de las diligencias por un juzgado de Vera (Almería), luego confirmado por la Audiencia de Almería.

El TC estima el recurso de amparo interpuesto por el abogado Francisco de Asís Parra, y declara vulnerado el derecho a la tutela judicial efectiva del cliente del letrado, en relación con el derecho a la integridad física y moral, y por ello declara la nulidad de los autos dictados por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Vera y por la Audiencia de Almería.

Según la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, el demandante fue detenido el 4 de marzo de 2021 en Cuevas del Almanzora por un delito de atentado y lesiones, por el que fue puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Vera al día siguiente.

Dicho tribunal lo citó el 19 de marzo para celebrar un juicio rápido, pero el 16 de marzo el perjudicado demandó a cuatro guardias civiles “por los hechos que tuvieron lugar mientras estuvo detenido, atribuyéndoles la comisión de los delitos de detención ilegal, torturas y lesiones”.

Según el demandante, iba de ocupante en un vehículo al que subió tras hacer autostop, bajo los efectos de drogas y alcohol, cuando fue interceptado en un control de la Guardia Civil.

El demandante señaló que uno de los agentes le indicó que se bajara del coche y se bajara los pantalones, a lo cual se negó, e inmediatamente fue detenido y conducido al cuartel, y en el trayecto el mismo agente que practicó la detención le “oprimió fuertemente” el cuello dentro del vehículo e incluso recibió un fuerte puñetazo en un ojo cuando lo sacaron del coche policial.

Sostuvo que ya en el cuartel, en la madrugada del 4 al 5 de marzo, recibió sucesivas palizas consistentes en tumbarlo para recibir golpes, puñetazos, y patadas en el cuello, pecho, barriga y espalda, todo con las esposas puestas.

Según la demanda, la asistencia letrada al detenido en dependencias policiales se realizó telefónicamente, a “instancias de los agentes y alegando conocimiento judicial al respecto, pese a que en esas fechas no se aplicaba el protocolo covid”.

Solicitó que se suspendiese el juicio rápido por la querella contra los agentes, cosa que se hizo, si bien finalmente en Vera se acordó el sobreseimiento y archivo de la causa, por lo que se recurrió ante la Audiencia de Almería, que desestimó dicho recurso.

Gracias al recurso ante el TC, la Fiscalía solicitó que le fuese concedido el amparo solicitado al entender que los órganos judiciales vulneraron los derechos fundamentales a la integridad física y moral y a la libertad por la falta de una investigación judicial suficiente de los hechos denunciados en la querella.

“En conclusión, la tutela dispensada por los órganos judiciales no fue suficiente, en primer lugar, porque se denunciaron unas agresiones que, de ser ciertas, alcanzarían la gravedad suficiente para constituir los tratos inhumanos o degradantes que prohíbe el art. 15 CE”, según el TC.

El Constitucional añade que, además, “pervivían en el momento del cierre de la instrucción sospechas razonables acerca de la producción posible de las agresiones denunciadas”, así como que “existían aún, en tal momento, vías disponibles para tratar de despejar, en el sentido que fuere, tales sospechas.

Por su parte, el abogado Francisco de Asís Parra ha mostrado su satisfacción por esta sentencia que “garantiza el derecho a la tutela judicial efectiva” de su cliente, y ha precisado que se propondrán ahora diferentes diligencias y pruebas para demostrar lo denunciado.