El jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, definió ayer ante el presidente de la Generalitat, Artur Mas, a España como "un gran equipo, plural y distinto en muchas cosas", y que cuanto más grande sea, más podrá aspirar a ser el mejor.

Rajoy lanzó este mensaje en el almuerzo que ofreció a directivos de empresas del sector del motor con motivo del Salón del Automóvil de Barcelona y que supuso la primera ocasión en que coincidía públicamente con Mas desde que ambos mantuvieran en marzo una reunión de la que sólo se supo unos días después.

También fue la primera vez que se les veía juntos desde que el pasado miércoles el Tribunal Constitucional suspendiera la declaración soberanista del Parlament de Cataluña, una decisión que Mas calificó de "insólita, altamente preocupante y profundamente decepcionante" y tras la que señaló que, pese a los "obstáculos", no congelará el camino soberanista.

El reencuentro entre Rajoy y Mas fue distendido, a tenor de las imágenes en las que se vio a ambos conversando en los prolegómenos del acto, y mantuvieron una conversación a solas en la que, según reveló el presidente de la Generalitat a los periodistas, sólo habían hablado de déficit y de presupuestos.

En su intervención en el almuerzo, realizada en castellano, Mas soslayó cualquier referencia al debate soberanista. Sólo hubo una reivindicación en materia de infraestructuras al reclamar que se desbloquee este año el Corredor del Mediterráneo, ya que consideró que el sector del automóvil y otros que son claves para Cataluña "lo necesitan como el pan"

Rajoy recogió el guante y, tras iniciar su intervención dirigiéndose a Mas citando su cargo en catalán (molt honorable president), confió en participar en la inauguración de ese corredor.

"Es una prioridad de nuestro Gobierno. Estamos en situación de dificultad desde el punto de vista presupuestario, pero a este corredor le damos la máxima importancia", aseguró.

Pero Rajoy no quiso desaprovechar la ocasión para hacer algún comentario en defensa de la permanencia de Cataluña en España aunque sin referirse explícitamente a las aspiraciones soberanistas catalanas.

Si Artur Mas aseguraba que "Cataluña va a oler a motor" este fin de semana con motivo del Gran Premio de Fórmula 1 de Montmeló, Rajoy expresó el respaldo de todos a Fernando Alonso para que logre la victoria en ese evento y eso le llevó a un símil deportivo.

"Lo más importante del deporte es demostrar que no podemos aspirar a nada grande si no somos grandes, si no contamos con la solidaridad y el trabajo conjunto de un gran equipo".

Y a renglón seguido llegó esta reflexión del presidente del Gobierno: "España es un gran equipo, plural, distinto en muchas cosas, trabajador, abierto y solidario. Cuanto más grande sea ese equipo y más capaz de fijar en común los objetivos, más podemos aspirar a lo que queremos, que es ser cada vez mejores".

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó por su parte en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros en La Moncloa que el Ejecutivo se siente reforzado por la suspensión de la declaración soberanista catalana ordenada por el Tribunal Constitucional, tras la impugnación del propio Gobierno, y aseguró que estudia y estudiará llevar al Alto Tribunal todo acuerdo que considere que incumple esa suspensión. Tras "un primer mensaje claro, a quien lo quiera escuchar", lanzado por el Alto Tribunal, auguró que pueden llegar otros. "Aquellas actuaciones que supongan incumplimientos de la suspensión, lo que el Gobierno va a hacer es enviarlas o incorporarlas al Tribunal Constitucional para que tengan sus efectos y para poner en evidencia la suspensión (de la declaración soberanista)", explicó.