Deportes

Doble estreno... triple gafe

  • El sevillismo pasó de la fiesta a la frustración en el debut de Llorente y del 'nuevo' estadio. Aplauso a la remodelación con quejas sobre algún detalle.

El Sevilla es reincidente en estrenos gafados. Los más supersticiosos incluso se tientan la ropa cada vez que el club quiere presentar algo nuevo. Pasó en el primer partido oficial del Ramón Sánchez-Pizjuán ante Betis, en 1958. Ocurrió frente al Espanyol, que se impuso por 0-3 en 1995, con el coliseo nervionense a reventar y un colorido precioso para celebrar el 90 aniversario del club. Y ocurrió, en menor medida, en el estreno del himno de El Arrebato, en octubre de 2005. La vibrante primera puesta en escena de ese himno legendario deparó un triste 0-0 ante el Alavés. Ante el Atlético, el estreno fue doble: el debut de Llorente se unió a la puesta de largo del remozado del estadio, todo rojo y lleno hasta la bandera. Se colgó el cartel de no hay billetes, salvo en la zona de visitantes, y el reventón de público terminó en dolorosísima derrota.

"El estadio es una preciosidad". Emilio Gallardo Godoy, socio 867 de Preferencia, resume el sentir del sevillismo al ingresar al mismo poco antes de las 20:30. A las 22:20, los mismos que disfrutaban al inicio de la fiesta bajaban por las escaleras meditabundos, frustrados por otra dura derrota ante el Atlético. Pero eso no quita que la aprobación a la reforma fuera casi unánime, con alguna queja por detalles a mejorar. Es la primera fase de la remodelación y aún queda mucho trabajo.

Juan Manuel Humanes, socio 11.043, disfrutó de la nueva imagen desde su localidad de Fondo. "A primera vista está maravilloso, con identidad propia y modernización, al menos de cara a la galería. Habrá que esperar a la remodelación completa, porque el interior también lo necesita".

"Visualmente, está más chulo de rojo, y con las leyendas. Pero los accesos al estadio están igual y los servicios tampoco han cambiado en Gol Sur", señala Manuel Fernández Carrión, socio 1.480. En Gol Norte, Franciso José Repiso Mestre, socio 4.290, también se divide entre el aplauso y la queja minutos antes del inicio: "La remodelación es acertada, incluso parece que hay más espacio en los pasillos. La frase Nervión no regala puntos me parece gafe...". Fue una premonición. Su queja se vuelve esperanza respecto a las rejas que dividen Gol y Fondo. "Espero que pongan rápido las divisiones de metacrilato, las rejas son estéticamente horrorosas y es muy desagradable ver el fútbol a través de ellas".

Los hermanos Fernández López son duales. Francisco, socio 16.589 de Gol Sur, lo tiene claro: "Mi opinión es positiva, antes el dinero se gastaba en fichajes raritos". Su hermano Sergio, inmediato en la nómina de socios con su número 16.590, duda más: "Todo depende de cuánto justifiquen económicamente por el cambio de color, del coste. Las goteras entiendo que sí había que solventarlas. Está muy bonito". "Con reformas superficiales se ha conseguido modernizar el aspecto del estadio. Los bancos no son nuevos, están pintados. Pero ha mejorado bastante la imagen", opina José Guillermo Paniagua Fuentes, que ha pasado por taquilla para ver un partido que terminó en frustración grande para ese sevillismo que se las prometía felices. La fortuna es parte del fútbol y, como otras veces, el estreno la tuvo contraria.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios