El gobierno municipal de Sevilla anunció ayer que los precios del servicio público de alquiler de bicicletas subirán a partir de abril de 2009, cuando cumple el contrato inicial firmado con JCDecaux que mantiene invariables las tarifas durante los años 2007 y 2008. El primer teniente de alcalde, Antonio Rodrigo Torrijos (IU), dijo ayer en respuesta a este periódico que una vez que expire el periodo fijado en los pliegos contractuales de la concesión "será necesario renegociar los precios de los abonos anuales y semanales del Sevici con la empresa porque, todo hay que decirlo, son exiguos y por lo tanto es muy difícil mantener esas tarifas en relación al coste de mantenimiento del servicio y también por la propia comparación con el resto de capitales que ofrecen bicicletas en alquiler".

Torrijos aseguró abiertamente que habría subidas en 2009 y la justificó aludiendo al coste del servicio en otras ciudades, donde, agregó, "cuesta del orden de 3 ó 4 veces más con un servicio mucho más deficiente que el que se presta en Sevilla e incluso con la participación económica del propio consistorio". El Sevici, gestionado por la firma francesa JCDecaux, no recibe transferencias municipales a cambio de gestionar la publicidad de los mupis de la capital -más de 500 módulos publicitarios- durante 20 años. "Todos sabemos que el mercado publicitario ha caído como consecuencia de la crisis, por lo que sólo queda la opción de subir las tarifas para mantener la calidad del servicio", precisó Torrijos, que reconoció que el incremento de ingresos se destinaría a "mejorar el mantenimiento de las bicicletas, aumentar la rotación de vehículos entre estaciones saturadas y vacías y ampliar el call center".

Las tarifas del Sevici -5 euros el abono semanal y 10 euros el anual , con la primera media hora de uso gratuita- son de las más económicas del arco de capitales nacionales y europeas con la excepción de Lyon, donde el pase anual cuesta 5 euros y el semanal un euro. En Barcelona, por ejemplo, Bicing cuenta con unas tarifas de 10 euros el pase semanal y 24 el anual (más del doble que en Sevilla); en París los precios son de uno, 5 y 29 euros los pases diarios, semanal y anual, respectivamente, y en Rennes la tarjeta anual cuesta 23 euros.

Y en Sevilla, ¿cuánto subirán los precios? "Ya lo veremos", adujo Torrijos, quien reseñó la necesidad de equipararlos con el del resto de ciudades con servicios similares. Lo que sí avanzó es que la actualización de tarifas se someterá a un amplio proceso de participación que integrará a consumidores, vecinos y otros colectivos económicos y sociales, y que su intención es la de mantener en vigor la gratuidad durante la primera media hora de uso.

Para el próximo año está prevista también la delimitación de un carril bici en la calle San Fernando, Avenida de la Constitución y Plaza Nueva que garantice el paso de bicicletas y la seguridad de los peatones tras dos años de complicada convivencia en una zona peatonalizada gracias a una inversión superior a 80 millones de euros que incluía el tranvía. Este dinero, en cambio, no había previsto técnicamente la cohabitación de peatones y ciclistas, por lo que la Delegación de Infraestructuras para la Sostenibilidad ha solicitado una reunión interna con la Concejalía de Movilidad para estudiar un carril bici alternativo por este eje que dé una solución real a la prohibición del tránsito de bicis por calles peatonales en horario comercial, que se instaurará en Navidades y continuará después indefinidamente.

"No será un carril bici al uso porque no se pintará de verde para evitar el impacto paisajístico en una zona monumental, por lo que se buscarán otras fórmulas lo suficientemente gráficas para que esa plataforma de rodadura sea reconocida por peatones y ciclistas", comentó Torrijos. Una opción, ya utilizada en una zona sensible como el Muelle de la Sal, sería la colocación de una plataforma sobreelevada de madera o la instalación de puntos leds en el pavimento.