Mairena del Aljarafe ha iniciado los trabajos para realizar una especie auditoría y catálogo sobre los árboles que existen en el casco urbano, su estado, sus características, las necesidades de agua que tienen y grado de adaptación al entorno, en lo que ha denominado un primer Plan Director del Árbol o “PGOU verde”, que guiará en adelante las actuaciones en esta materia y las campañas de concienciación.

Se enmarca en la “apuesta por la sostenibilidad y contra el cambio climático y en la estrategia local para convertir a los árboles en protagonistas de la agenda de la ciudad”, según destaca el Consistorio que preside Antonio Conde (PSOE).

Fuentes municipales precisan que los trabajos se están haciendo a través de la empresa que se encarga de la recogida de residuos, ya que el contrato con la misma contempla su colaboración en este tipo de proyectos de carácter medioambiental.

Está previsto que la auditoría y las propuestas estén hechas para el año 2023. Los plazos son largos, según han reconocido las fuentes consultadas, aunque han insistido en que se trata de un documento que pretende ser “muy exhaustivo” y en el que las campañas de divulgación serán también importantes.

Los pilares más importantes del mismo son: planificar mejor las diferentes plantaciones que el Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe ya tiene previstas, perfeccionar la relación de estas especies con el entorno, hacer más eficaz su mantenimiento y también divulgar la importancia del árbol en el entorno urbano entre la ciudadanía, para evitar actos vandálicos e implicar al entorno en su conservación. “Mejorar, en definitiva, la simbiosis entre el árbol y la sociedad para seguir consiguiendo una Mairena más conectada con la naturaleza”, señalan.

En esta primera fase, se están recogiendo datos concretos de cada uno de los árboles de la localidad, realizando así una auditoría exhaustiva de todo el patrimonio verde de Mairena del Aljarafe. También se está catalogando el estado de cada árbol, su edad, los recursos que necesita, su ubicación, la sombra que proporciona, el oxígeno que aporta, su especie y sus necesidades.

Esta tarea permitirá diferentes campañas de concienciación basadas en el juego y en las nuevas tecnologías (combinando mapeado y geolocalización, registro de especies singulares, edades, currículo escolar...). Además, servirá para mejorar las labores de plantación, mantenimiento y posibles sustituciones que se realicen mientras se termina el plan, que estará completamente definido en 2023.

Más concretamente, en cuanto a la futura plantación de árboles, el plan será clave porque habrá establecido ya criterios actualizados, objetivos y universales. Para la puesta en marcha y la elaboración de este plan se han tenido en cuenta las aportaciones que la ciudadanía ha venido haciendo en los últimos años a través de los diferentes canales de comunicación abiertos.