El Rey llamó a Mohamed VI y le ofreció ayuda para rescatar a los espeleólogos

Felipe VI llamó en la tarde del Viernes Santo al rey de Marruecos, Mohamed VI, para ofrecer la ayuda de equipos españoles en el rescate de los espeleólogos accidentados en las montañas del Atlas, cuando todavía eran dos los supervivientes: el policía granadino José Antonio Martínez, que falleció el domingo a causa de las heridas, y Juan Bolívar, que pudo ser rescatado con vida el mismo día.

El monarca alauí, según fuentes conocedoras de las gestiones, aceptó el ofrecimiento, pero cuando se comunicó a la Gendarmería marroquí la disponibilidad de España de enviar medios técnicos y humanos para participar en el rescate, las fuerzas de seguridad del país africano consideraron que no le hacían falta y que podría llevar a cabo el rescate por sus propios medios. Finalmente, Marruecos terminó aceptando la ayuda española y autorizó la entrada en el país de cuatro especialistas del servicios de montaña de la Guardia Civil y tres especialistas de los GEO de la Policía Nacional enviados desde Madrid.

Un portavoz de la Casa del Rey, preguntado por la llamada de Felipe VI a Mohamed VI, se limitó a a señalar que el jefe del Estado se mantuvo "permanentemente informado e interesado" en relación con el rescate de los espeleólogos. La llamada del Monarca español a su homólogo marroquí demuestra que España hizo gestiones al más alto nivel para ofrecer a Marruecos toda la ayuda que pudiera precisar para rescatar a los espeleólogos accidentados.

Durante toda la jornada de ayer se produjo una cascada de declaraciones desde todos los ámbitos de la política, entre las que destacó la del portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, que reconoció que "parece que las cosas no se han hecho bien" y agregó que Martínez "podría haber sido salvado y rescatado". Hernando, que no atribuyó directamente la culpa a ningún estamento, afirmó que "habrá una responsabilidad que tendrá que ser expuesta y reconocida y es lo que esperamos, que se reconozca esa responsabilidad por parte de aquellos que, a mi juicio, no parece que hayan actuado adecuadamente", manifestó durante una rueda de prensa en Almería.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, destacó ayer "la buena voluntad" de Marruecos y quiso recordar que "es un Estado soberano y tiene sus propios protocolos de actuación", por lo que los equipos españoles no podrían haber entrado en el país vecino sin antes obtener el permiso. Sáenz de Santamaría también aseguró que el Ejecutivo ha tenido "muchos contactos con las autoridades marroquíes" para ayudar en el rescate.

En la oposición, la postura pasa por pedir explicaciones al Gobierno, cosa que hará el Grupo parlamentario Socialista en la sesión de control del miércoles en el Congreso. El diputado andaluz Miguel Ángel Heredia dirigirá una pregunta al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, sobre la información de la que dispone acerca de las circunstancias del rescate, ante la ausencia del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo. "Lo que ha ocurrido es grave. El Gobierno tiene que dar información", aseguró el secretario de Organización del PSOE, Cesar Luena.

El grupo Izquierda Plural, por su parte, pidió ayer la comparecencia de García-Margallo en el Congreso de los Diputados.