La patronal de los ambulantes se desmarca del reparto de octavillas

Zoido opta por guardar silencio, Espadas señala que se trata de "una ilegalidad como un piano" y estudia denunciarlo a la JEZ.

Vecinos de Torreblanca pasean por una de las calles de la barriada, uno de los territorios con más paro y clave para el resultado electoral.
Vecinos de Torreblanca pasean por una de las calles de la barriada, uno de los territorios con más paro y clave para el resultado electoral.
M. Ruesga

15 de mayo 2015 - 01:00

El presidente de la Asociación de Comerciantes Ambulantes de Sevilla y su provincia (ACA), Antonio Malla, no paró de recibir ayer un aluvión de llamadas de los distintos medios de comunicación que preguntaban por su posible vinculación con el reparto de octavillas que piden el voto para el Partido Popular en Torreblanca a cambio de ayudas sociales. "Nosotros somos una entidad empresarial que no puede pedir el voto para ninguna formación política, y mucho menos en plena campaña electoral como estamos ahora". Es más, señaló que su asociación nunca hizo campaña a favor de ningún candidato, ni con Juan Ignacio Zoido ni con Alfredo Sánchez Monteseirín. "A nosotros siempre se nos relaciona con cualquier acontecimiento que afecta a los vendedores ambulantes, algunas veces con razón y otras, como en este caso, sin ella". El presidente de la ACA tiene claro quién está detrás del reparto de panfletos por la barriada: "Puedo afirmar que ellos ven bien esta práctica, pero les solicité que incluyeran su nombre en los papeles para evitar confusiones".

En el acto de campaña que tuvo lugar ayer en el Muelle de la Sal, Juan Ignacio Zoido guardó silencio sobre la polémica, avanzada por Diario de Sevilla. Fuentes municipales confirmaron a este periódico que se trata de una iniciativa particular de una asociación de comerciantes ambulantes que, como cualquier otra entidad puede hacer, ha solicitado el uso de las instalaciones municipales en Torreblanca por nueve días y durante dos horas diarias, de 17:00 a 19:00. Estas mismas fuentes admitieron que es evidente, por el documento que se reparte, que los ambulantes piden el voto para el PP, algo que no consideraron ilícito, e insistieron en desvincular tanto al partido como al Ayuntamiento de Sevilla de esta acción electoral.

El resto de partidos políticos si hablaron. Fue el caso del portavoz socialista y candidato a la Alcaldía, Juan Espadas, que tachó de "ilegalidad como un piano" el buzoneo realizado en Torreblanca de unas octavillas en las que se invita a los vecinos a acudir a un centro cívico para comunicar sus problemas en materia de vivienda o empleo para ser auxiliados "en un futuro". Espadas reclamó al alcalde explicaciones de "por qué apoya iniciativas en las que con las siglas de su partido se le falta el respeto a la dignidad de las personas y a la libertad del ejercicio del derecho al voto". También lamentó los hechos: "Es muy grave. Se ha buzoneado todo el barrio diciéndole a la gente que si quieren resolver sus problemas de comida, empleo o vivienda, el PP va a resolverlo y que vayan al centro cívico, a un edificio municipal, a ser atendidos por unas personas entre las que hay gente nombrada por Zoido", explicó. Se trata de "una ilegalidad como un piano y una indignidad" que el PSOE estudia ya elevar a la Junta Electoral de Zona (JEZ) "en función de lo que diga" el candidato popular.

Izquierda Unida se sumó a la condena del polémico buzoneo. "No es la primera vez que pasa algo de esta naturaleza", pues "en la anterior campaña, asociaciones de vecinos del Polígono Sur también denunciaron esto", señaló Daniel González Rojas, candidato a la Alcaldía. Se trata, en su opinión, de "una compra de votos a cambio de servicios sociales", una práctica "caciquil" y "mafiosa" propia de un partido "acostumbrado a repartir sobres con dinero negro y cobrar sobresueldos". Por eso, reclamó "explicaciones" al Partido Popular por un hecho que afecta a uno de los barrios con más paro de la ciudad.

Desde Participa Sevilla se reclaman "responsabilidades políticas" si se "corrobora" una supuesta "compra de votos" en la barriada de Torreblanca. Para la formación, se trataría de un "escándalo" que "no puede quedar impune", de modo que "es necesaria una investigación, que se aclare todo, que intervenga la autoridad electoral". Además, apuntó que "si se corrobora la información publicada, estaríamos ante un hecho anti-democrático, caciquil y bochornoso que, como mínimo, tiene que tener responsabilidades políticas, como la destitución fulminante del jefe de campaña del PP", concretó Nacho Molina, número siete de la lista del partido y militante de Podemos. Participa Sevilla considera que es "impresentable mercadear electoralmente con el sufrimiento de las personas que han producido las propias políticas de recorte que la casta, en sus dos variantes, PP y PSOE, ha ido impulsado a lo largo de los últimos años", en palabras del sindicalista.

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