Cenas fuera de casa sin gastar demasiado: trucos para ahorrar en restaurantes
Las bebidas y el postre pueden engrosar demasiado la cuenta
Consejos para comer saludable fuera de casa y no interrumpir tu plan de alimentación
Estos son los mejores restaurantes (y platos) para acertar en Sevilla, según Traveler

Salir a cenar fuera es un plan que a cualquiera le encanta. Despreocuparnos de cocinar y disfrutar de una buena comida es, desde luego, uno de esos pequeños placeres de la vida. Aunque, claro, es más caro que prepararnos algo en casa. Y, en los tiempos que corren, en los que hay que destinar una parte importante del salario al alquiler o hipoteca y a los gastos fijos de cada mes, puede antojarse más complicado salir por la noche a disfrutar de una agradable velada.
Sin embargo, hay varios trucos que podemos seguir para no llevarnos un susto cuando pidamos la cuenta, y disfrutar de cenar fuera sin que sufra demasiado el bolsillo. Son los siguientes:
Aprovecharse de las ofertas y promociones
Hay algunos restaurantes que, en días u horas de baja demanda, ofrecen promociones, como por ejemplo un 2x1 en determinados platos. Una idea para ahorrarnos algo de dinero en la cuenta es estar atentos a estas ofertas y planificar la cena para cuando estén activas.
Igualmente, existen páginas web en las que podemos conseguir cupones de descuento para ciertos restaurantes, con lo que también lograríamos reducir la cuantía que debemos gastar para disfrutar de la velada. Suscribirnos a las newsletters de estas plataformas (o de los propios restaurantes) nos permitirá estar al tanto de las posibles promociones.
No excedernos con las bebidas
Cuando vamos a cenar fuera la comida, obviamente, es la gran protagonista de la velada, y también de la cuenta; sin embargo, esta última puede dispararse si nos excedemos con las bebidas. Un consejo para reducir drásticamente la cantidad a abonar es pedir agua del grifo o una botella para compartir.
Si se prefiere disfrutar de la comida con, por ejemplo, algo de vino, la recomendación es que no se pidan muchas rondas (y ni mucho menos una botella). El 'de la casa', además, seguramente sea la opción más económica; en cuanto a las cervezas, la de barril, por norma general, es la opción más económica.
El postre, por su parte, también puede incrementar considerablemente la cuenta, por lo que es recomendable prescindir de él o, si los que nos ofrece la carta son realmente irresistibles, compartir uno entre los comensales.
Elegir bien lo que vayamos a pedir
Elegir bien los platos que vayamos a pedir igualmente es clave para que la cantidad que marque la cuenta no sea demasiado cuantiosa. Si vamos al restaurante entre semana es posible que nos ofrezca 'menú del día', que puede ser una opción realmente económica en la que, además, se suele incluir tanto la bebida como el postre.
Por otro lado, si somos varios comensales es más recomendable pedir varios platos para compartir; además de ser más económico, podremos probar mayor variedad de la carta del restaurante.
Pedir para llevar lo que sobre
Si no te acabas todo lo que comandado podéis pedirlo para llevar, una práctica cada vez más habitual en los restaurantes. Esas sobras podrían ayudarte a completar el menú del almuerzo o la cena del día siguiente, por lo que el bolsillo lo agradecerá. Con este gesto, además, estarás contribuyendo a evitar el desperdicio de comida, siendo igualmente más responsable con el medio ambiente.
También te puede interesar
Lo último