Deportes

Cristiano Ronaldo, el hombre gol

  • Los 22 goles del portugués en 18 jornadas invitan a pensar en una progresión aritmética que pasaría de los 44 y destrozaría los récords de Zarra y Hugo Sánchez · Su efectividad es casi la única baza del Real Madrid

Está condenado a ir por detrás de Leo Messi y a agachar la cabeza cada vez que se enfrente a él en un clásico (al menos, lo ocurrido hasta ahora). Debe ser triste y desesperante, encima, que el día después de que sus números bombardeen cualquier registro goleador de la Liga y disparen su liderato en el carrera por la Bota de Oro, su gran enemigo obtenga por segundo año consecutivo de manos de la FIFA el Balón de Oro, el mayor premio a nivel individual que puede recibir un futbolista profesional.

Pero Cristiano Ronaldo va camino de hacer historia y destrozar todos los récords del trofeo Pichichi, el que premia al mejor artillero de la Liga española cada temporada. Si a lo largo de la historia el 38 es el número mágico, sólo al alcance hasta ahora de dos ilustres como Telmo Zarra y Hugo Sánchez, la progresión que promete el portugués en su segunda temporada como madridista va camino de quedarse en apreciable anécdota. El hat trick que firmó el domingo ante el Villarreal eleva a 22 la cifra actual de goles en sólo 18 partidos de Liga y con una jornada por delante para llegar a la mitad de la competición. Para más inri para sus perseguidores, habría que añadirle uno más que no reflejó el acta del Real Sociedad-Real Madrid y que él y el diario Marca -al fin y al cabo el rotativo que otorga anualmente el galardón- se lo adjudican. Fue un lanzamiento de falta que pegó en su compañero Pepe, pero que iba en dirección a la portería. Digamos, de cualquier forma, que, con 22 o con 23, la progresión aritmética marca que Cristiano Ronaldo debe acabar la Liga con 44, 45 o 46 goles.

Es la gran baza del Real Madrid, la esperanza de Mourinho ante la evidencia de que el Barcelona, hoy por hoy, dibuja un fútbol más excelso, más fiable y más resolutivo, argumentos más que suficientes como para no dejar escapar el título. Porque, para fiabilidad, en el Bernabéu sólo la tiene Cristiano. Sus números no paran. Lleva más goles que partidos, 63 en 62 actuaciones entre Liga, Champions y Copa del Rey. Hay veces que esto no es suficiente, pero ahí queda. El siete del Madrid ha marcado ya 30 goles en media temporada, 31 si se cuenta el de Anoeta que él reclama.

Y no basta porque el equipo de Mourinho se atasca demasiadas veces. Si el Sevilla hace unas semanas lo obligó a sudar con un buen planteamiento defensivo, el Villarreal bordó el fútbol en una primera parte que dejó helado el Bernabéu. Y son demasiadas muestras de debilidad para un conjunto que aspira a toserle de verdad al gran Barcelona de los tres nominados al Balón de Oro, porque sólo podía ganar uno, pero eran tres.

El propio Mourinho admitió públicamente que su equipo no había merecido llegar con empate al descanso, pero para eso está Cristiano Ronaldo. Sus tres goles y su asistencia a Kaká permitieron al Real Madrid remontar y no perder en el horizonte la matrícula del coche que pilota el Barcelona. Con Higuaín lesionado y el técnico llorando ante Florentino por que éste coja la chequera, Mourinho reza para que su compatriota no se resfríe. El controvertido entrenador ha sido quien más ha sabido sacar de Cristiano. Acaba de empezar el año y el internacional luso está a dos goles de los que anotó con Pellegrini. También es verdad que una lesión lo tuvo parado un buen puñado de jornadas, pero constrastan sus 31 goles en 27 partidos de la actual campaña con los 33 en 35 actuaciones con que terminó en la pasada.

Una barbaridad de goles para un portento de futbolista que sólo tiene un problema: haber coincidido en el tiempo con el mejor de todos, Leo Messi.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios