No se pronuncia en público desde el partido ante el Vitoria de Setúbal en Cartaya, pero Pepe Mel sigue aguardando la llegada de refuerzos. Ayer, el técnico verdiblanco se encontró con el director deportivo, Eduardo Maciá, y en la primera conversación que mantuvieron ambos volvió a insistirle en la necesidad de traer al menos cuatro refuerzos, después de que las dos semanas de trabajo entre Montecastillo y Bad Kreuznach haya detectado nuevas carencias en el equipo.

A la repetida petición de velocidad para la zona ofensiva, donde el técnico pretendería al menos la llegada de un extremo -lo ideal sería dos y un delantero-, Mel le solicitó a Maciá la llegada de otro central y de un lateral izquierdo. De hecho, el propio valenciano lleva trabajando días en el fichaje de éste último, toda vez que la salida de Álex Martínez parece prácticamente segura antes del cierre de mercado.

Tarek, que ha sido empleado de lateral izquierdo y ayer también de central, no ha convencido al entrenador para ocupar un rol principal en el equipo, ya que, ahora mismo, se lo considera un jugador en formación que necesita adaptarse al ritmo y a la táctica de Europa, por más que ayer sí exhibiese su potencia y velocidad en el puesto de central.

Ante esta situación, el técnico prefiere que el club reparta el dinero disponible para la llegada de cuatro refuerzos y no los dos previstos inicialmente por el director deportivo, como él mismo manifestó hace unos días.

Esta falta de disponibilidad económica supondría un obstáculo para la llegada de Izet Hajrovic, el extremo preferido en los planes de los técnicos. Maciá maneja amplios informes del internacional bosnio, después de que destacase en una eliminatoria europea entre la Fiorentina y el Grasshoppers. El extremo no tiene sitio entre los titulares del Werder Bremen, de ahí que medite buscar una salida para continuar con la proyección que apuntó en su día. El Betis intentaría plantear la posibilidad de una cesión con opción de compra, aunque la alta ficha de Hajrovic, que llegó con la carta de libertad al conjunto teutón tras romper su vinculación con el Galatasaray, también sería tenida en cuenta a la hora de evaluar el esfuerzo necesario para su fichaje.