Paso adelante con Beñat a la corneta

La victoria de Gerona, si finalmente asciende el Betis, será destacada en los análisis de este peregrinaje interminable. Por el contenido, al cerrar de forma casi definitiva las dudas que creó la racha de derrotas, y por las formas, al llegar tras salvar un contratiempo añadido, el agua. Tuvo carácter y capacidad el Betis para leer sobre la marcha lo que el partido pedía, y logró el control invitado por el brío y el fútbol que mana de las botas de Beñat. Él dirigió la presión, y él abrió la puerta desde la esquina.

DEFENSA

El Girona apeló al fútbol directo para evitar pérdidas de balón cercanas a su portería e intentar cazar al Betis en una dejada atrás de Despotovic o en una segunda jugada, tras el rechace de la zaga. Lo hubiera hecho con el terreno de juego seco, y con más razón lo hizo viendo el suelo tan anegado. Pero la defensa verdiblanca anduvo muy despierta en los despejes, evitó que la pelota se quedara en zona propicia para los disparos a media distancia y se cuidó mucho de cometer faltas cercanas al área. El único problema llegó en un rebote en un defensor que cayó a los pies de Peragón, quien estrelló el balón en la base del poste izquierdo de Casto. Una jugada fortuita de esas que suele contener un juego como el fútbol.

En la segunda parte, ese paso adelante de todo el Betis cerró el debate. El Girona se quedó sin salida, su media se hundió ante la pujanza de los béticos y los pelotazos a Kiko Ratón fueron controlados siempre por los expertos centrales.

ATAQUE

Le costó salir de los charcos en la primera mitad, con el equipo demasiado largo en el campo, sin conexión en las transiciones defensa-ataque, pero con el paso adelante que debió ordenar Mel en la caseta de vestuarios, todo fluyó mucho mejor en la segunda parte. El Betis atornilló atrás al Girona, con Iriney y sobre todo Beñat ahogando la salida de los catalanes, juntando las líneas y facilitando que los verdiblancos percutieran una y otra vez hasta que cayera el gol, como así fue.

VIRTUDES

La capacidad para adaptarse a las circunstancias.

TALÓN DE AQUILES

Esa desconexión de la primera mitad, con Emana, Rubén Castro y Jorge Molina metidos en charcos.