La necesaria confianza

A nadie se le escapa que Pepe Mel se juega algo más que tres puntos el próximo domingo ante el Albacete. Los mensajes de confianza desde todos los estamentos del club se han sucedido tras la derrota del domingo, pero el cuerpo técnico es consciente de que una sexta derrota consecutiva podría traer unas consecuencias irrevocables.

"Tenemos que sacar los tres partidos de la próxima semana, pero el primero es el domingo y es el más importante. Si no se consigue la victoria, ya se sabe lo que puede pasar. Así es el fútbol", comenta una de las personas cercanas al entrenador sobre la situación del equipo. El crédito de Mel se elevó con su buen hacer en la primera vuelta e incluso a otro técnico se le hubiera agotado mucho antes. Además, el club ha cerrado filas en las últimas dos semanas con respecto al técnico, consciente de la dificultad que representaría ahora nombrar a un sustituto, tanto por la precaria situación económica de la entidad como por lo complicado que sería que se adaptara con rapidez a la situación actual del Betis.

"El técnico tiene fuerza para sacar esto adelante. Lo vi entero tras el partido y tiene capacidad para sacar esto. Tiene nuestra plena confianza y nuestra idea es continuar con este cuerpo técnico. Se consiguió una primera vuelta impresionante y tiene toda la confianza", asegura el director deportivo, Vlada Stosic, mostrando su cercanía con el entrenador. Y es que si en algún momento llegó a existir alguna diferencia entre el club y el cuerpo técnico, ahora todos reman en la misma dirección. Incluso en el viaje de vuelta desde Valladolid, el club puso a disposición del técnico cualquier elemento que considerase necesario para reactivar al equipo.

"Mi relación con Stosic, Gordillo, Guillén y Bosch, que son con los que más trato, es cordial. No he notado nada raro. El problema es que no hemos podido compartir alegrías en este tiempo, pero siempre me he sentido apoyado por ellos. La solución está dentro del vestuario. Tenemos que competir al máximo, morder por cada balón y hacer los goles. Es función de todos los que nos rodean que el futbolista esté tranquilo en los demás temas", afirmó ayer Mel en la Cope, donde repasó la actualidad verdiblanca. El entrenador tiene claro que se siente con fuerzas, algo que pretende transmitir a su plantilla. "Hay que morir matando. Nadie dirá nada si se falla, pero sí por no intentarlo", espetó el técnico en la charla que mantuvo con sus jugadores el pasado lunes. "Si sintiera que la plantilla no confía en mí sí que estaría jodido y preocupado y tendría poca solución. Ellos están a muerte conmigo y yo con ellos", dijo el técnico, aludiendo a la necesaria confianza.