Cajasur tendrá que prescindir de un mínimo de 550 empleados

El importe de la operación de intervención del Banco de España en Cajasur para evitar su quiebra asciende a 800 millones de euros en concepto de cuotas participativas adquiridas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), aunque también se ha dispuesto una línea de 1.500 millones para garantizar la liquidez de la entidad andaluza, que no se ha utilizado aún. La entidad supervisora prevé, además, que el coste laboral necesario para la supervivencia de la entidad ascienda a un mínimo de 550 empleados, cien más de los previstos por Boston Consulting para la ya frustrada fusión con Unicaja.

Estas son las principales conclusiones de la comparecencia a puerta cerrada del subgobernador del Banco de España y presidente de la Comisión Rectora del FROB, Javier Aríztegui, ante la subcomisión del Congreso encargada de supervisar la actuación del Fondo. La entidad supervisora prevé tener lista la venta de Cajasur antes del próximo diez de julio. Aunque en su comparecencia Aríztegui no precisó cuáles son las entidades interesadas en la caja cordobesa, todo apunta a que son Unicaja, Cajasol, Ibercaja, BBK, Sabadell, BBVA y Caixa Geral. No se descarta, de todas formas, que en el día de ayer alguna entidad más se haya sumado a la puja. Según fuentes del sector, el Banco de España se inclina por el BBVA. El hecho de ser un banco serviría de aviso a las cajas para que no se duerman en los laureles. Y hay que tener en cuenta que Cajasur es un objetivo muy alta apetecible, como demuestra el hecho de que la "alta fidelidad" de los clientes de la entidad no haya hecho necesario recurrir a una línea anticipada.

El subgobernador del Banco de España calculó que las cajas inmersas en procesos de reestructuración pedirán ayudas públicas por importe de entre 11.000 y 11.500 millones de euros y reducirán sus plantillas en una media de entre el 15% y el 20%.

Respecto a los ajustes en las entidades, explicó que los tres procesos aprobados formalmente por el FROB hasta ahora, el de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa, la de las cajas de Terrassa, Sabadell y Manlleu, y la Caja Duero y Caja España, han supuesto una reducción de entre el 20% y 25% en las plantillas y del 15% y 20% en número de oficinas que podría ser orientativa para estimar el impacto en el resto de procesos.

Por otro lado, los presidentes de Caja Madrid, Rodrigo Rato, Bancaja, José Luis Olivas; Caja Insular de Canarias, Juan Manuel Suárez del Toro; Caixa Laietana, Jaume Porter; Caja Ávila, Agustín González; Caja Segovia, Atilano Soto; y Caja Rioja, Fernando Beltrán, firmaron ayer el Protocolo de Integración para la formación de un Sistema Institucional de Protección, después de que el día anterior los consejos de administración de todas las cajas ratificaran el acuerdo. Los máximos representantes de las entidades mostraron "su satisfacción" por el inicio de esta alianza estratégica, que "les consolida como la primera caja de ahorros de España".