Margarita Bustamante deja Feragua para centrarse en su actividad profesional

Julián Borja, ex presidente de los arroceros, y José Manuel Cepeda, de Margen Izquierda del Genil, aspiran a sucederle en la presidencia.

Margarita Bustamante, presidenta de Feragua.
Margarita Bustamante, presidenta de Feragua.
Redacción Sevilla

02 de diciembre 2014 - 05:02

Margarita Bustamante dejará la presidencia de la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua), la más representativa del sector, después de seis años al frente de la organización. Su marcha será efectiva el 11 de diciembre, fecha en la que se celebrarán elecciones para designar al nuevo presidente.

Bustamante precisó ayer a este periódico que deja el cargo por para dedicarse más a sus actividades profesionales. "Llega un momento en que me canso, no vivo de esto y me ocupa mucho tiempo. Llevamos preparando el relevo desde septiembre y creo que es el momento de dar paso a alguien que me sustituya".

De momento, se han presentado dos candidaturas para sustituirla. La de Julian Borja, ex presidente de la Federación de Arroceros del Guadalquivir, y la de José Manuel Cepeda Sanz, de la Comunidad de Regantes Margen Derecha del Genil, con sede en Palma del Río (Córdoba).

Según indicó ayer Feragua en una nota, Bustamante accedió al cargo en 2008 y bajo su presidencia la organización ha llevado a cabo una "oposición decidida y vehemente al dragado del Guadalquivir, al menos en los plazos y condiciones expuestas por la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento". También ha luchado "contra los efectos del tarifazo eléctrico del Gobierno en agosto de 2013, primero abanderando una protesta masiva que concentró a más de 7.000 regantes de toda Andalucía, y luego impulsando la creación de la Central de Compras de Energía, junto a la comercializadora andaluza Energía Plus", afirma la nota.

Margarita Bustamante protagonizó una campaña a favor de que las competencias sobre el Guadalquivir volvieran a manos del Estado, "frente a los intentos de politizar y provincializar la gestión del agua".

La nota también cita la oposición frontal a los cánones propuestos año tras año para los embalses de la Breña II y Arenoso, la retirada del IBI de los embalses, la eliminación de la tasa del 5% en la Ley de Aguas de Andalucía -ahorro de unos dos millones de euros-, las dotaciones logradas en la nueva Agenda de Regadíos de 2015, la elevación de la cuantía máxima de la ayuda para la modernización de regadíos, o las dotaciones aprobadas por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y por la Consejería de Medio Ambiente en los planes hidrológicos del Guadalquivir y de las cuencas litorales andaluzas.

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