El 'cajón' de Umbrete: Una tradición centenaria en el Rocío

La carreta del su simpecado destaca por un peculiar diseño que la diferencia del resto

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La carreta del Simpecado de la Hermandad del Rocío de Umbrete en su paso por Villamanrique
La carreta del Simpecado de la Hermandad del Rocío de Umbrete en su paso por Villamanrique / M. G.
M. H.

Sevilla, 04 de junio 2025 - 14:08

Este miércoles 4 de junio han echado a andar multitud de romeros de la provincia de Sevilla con un único objetivo: la aldea almonteña. De las 127 filiales que se cuentan ya en 2025, hasta 50 hermandades han sido fundadas en la provincia sevillana, de gran arraigo rociero.

Un pueblo de gran devoción rociera es Umbrete, cuya carreta del simpecado de la hermandad es conocida popularmente como "el cajón de Umbrete", un apelativo que ha perdurado durante generaciones debido a su característica forma rectangular y cerrada.

Filial nº 7

De hecho, la Real y Fervorosa Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Umbrete es la filial número 7 de la Hermandad Matriz de Almonte.

El cajón de Umbrete es un diseño único entre las numerosas carretas que caminan hacia el Rocío, que data de 1910, y que contrasta con las ornamentadas carretas-templete que predominan en la mayoría de hermandades rocieras, convirtiéndose en un símbolo inconfundible de su peregrinación.

El origen del sobrenombre resulta evidente al contemplar su estructura. A diferencia de las carretas más barrocas y decoradas, la de Umbrete presenta un aspecto más funcional y austero, semejante a un gran cofre o cajón de madera.

Se trata de una singularidad estética, que lejos de ser un inconveniente, se ha transformado en motivo de orgullo y seña de identidad para los hermanos y vecinos de esta localidad sevillana.

Fundada en 1814

Fundada oficialmente en 1814, la Hermandad del Rocío de Umbrete ocupa el séptimo lugar en antigüedad entre las hermandades filiales. No obstante, la devoción rociera en la localidad es anterior a su constitución formal, con numerosos vecinos que ya peregrinaban a la aldea almonteña antes de organizarse como hermandad.

Durante sus más de dos siglos de historia, esta hermandad ha mantenido vivas sus tradiciones y su ferviente devoción a la Blanca Paloma. El "cajón de Umbrete" trasciende su función como mero transporte del simpecado para convertirse en un auténtico emblema cultural. Su diseño único refleja el carácter propio de esta hermandad, que ha sabido mantener su esencia a través de los años sin dejarse llevar por otras tendencias estéticas.

Un diseño único

A pesar de la homogeneización estética que ha marcado a muchas carretas rocieras contemporáneas, la hermandad de Umbrete ha sabido conservar con orgullo esta joya histórica, fiel reflejo de su identidad y de su devoción centenaria.

La carreta constituye uno de los elementos más reconocibles durante el tránsito de las hermandades hacia la aldea del Rocío, provocando que muchos peregrinos y visitantes esperen su paso para contemplar esta singular pieza de artesanía tradicional que se ha mantenido prácticamente inalterada durante más de un siglo.

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