Una Diada menos multitudinaria

Entre 12.000 y 15.000 personas, según fuentes de la Generalitat, acudieron ayer al acto institucional en el Parque de la Ciutadella de Barcelona con motivo de la Diada de Cataluña. La asistencia es muy inferior a las 20.000 personas presentes en 2006 y 2007, según datos oficiales.

La mayoría de los partidos catalanes alertaron de las consecuencias que puede tener para Cataluña y España un mal acuerdo en materia de financiación autonómica, una advertencia que realizaron sus dirigentes tras la tradicional ofrenda al monumento a Rafael Casanova. El presidente de la Generalitat, José Montilla, admitió que ahora "no es el mejor momento" para negociar aunque recalcó que la crisis hace "aún más necesario" el acuerdo.

Un grupo de encapuchados quemó una foto de los Reyes y las banderas de España y Francia al final de una de las manifestaciones independentistas que se celebraron ayer en Barcelona. Antes de iniciarse los parlamentos, los radicales, vestidos con una especie de mono, subieron a la tarima para quemar la imagen de la Familia Real.