Populares y socialistas dan por cerrado el incidente del Rey en Botsuana

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, consideró ayer que la polémica en torno al rey Juan Carlos, que fue intervenido de la cadera tras caerse en un viaje a Botsuana, ha quedado ya superada. En una conversación informal con periodistas en el avión en el que se trasladó desde México hasta Bogotá, Rajoy se mostró convencido de que "las cosas van a ir bien en el futuro".

Hoy mismo, cuando regrese a Madrid, Mariano Rajoy tiene previsto despachar con el Rey en el Palacio de la Zarzuela.

El jefe del Ejecutivo destacó la dedicación del Monarca y su conocimiento de la agenda política, en especial del contexto internacional.

El miércoles Rajoy aprovechó una declaración institucional en México para defender públicamente la figura de don Juan Carlos. "Es de justicia reconocer su mérito y dedicación de tantos años al progreso de España y a los lazos que nos unen con la comunidad iberoamericana", dijo. Preguntado por su opinión sobre las disculpas del Rey, se limitó a señalar que había sido "muy claro".

"Lo siento mucho. Me he equivocado. No volverá a ocurrir", manifestó el Rey al abandonar la clínica en la que había sido operado de la cadera.

La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, cree que la polémica surgida en torno al viaje de caza del Rey es "una oportunidad para mejorar las cosas" y se mostró convencida de que Don Juan Carlos "sabrá adaptarse a lo que los ciudadanos españoles le piden".

En rueda de prensa en la sede del partido, la número dos del PSOE rechazó la petición del coordinador general de IU, Cayo Lara, de un referéndum sobre la Monarquía: "No nos parece que sea lo más importante que le sucede a la sociedad española, hay muchas otras prioridades, me temo". Según explicó, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, no ha pedido aún audiencia con el Rey, a la espera de que "se recupere" de la operación de cadera a la que se sometió el fin de semana.

Preguntada si a raíz del episodio la Casa Real debería estar afectada por la Ley de Transparencia que prepara el Gobierno, replicó que no es tanto cuestión de leyes, sino de que situaciones como ésta "siempre son una oportunidad para mejorar las cosas". "Todos estaremos de acuerdo en mejorar las cosas para que esto que ha sucedido no vuelva a suceder y así lo dijo Su Majestad", añadió. No obstante, no precisó en qué "detalles" podrían traducirse esas mejoras y optó por subrayar que la monarquía española "ha sabido siempre adaptarse a los tiempos y el Rey siempre ha estado a la altura de lo que se le pedía".

"Lo ha hecho siempre y yo tengo plena confianza en que lo seguirá haciendo. Los detalles, lo que haya que cambiar, habrá que conversarlo, pero una vez más estoy convencida de que el Rey sabrá adaptarse a lo que los ciudadanos españoles le piden", insistió.

Por contra, el líder de IU, Cayo Lara, insistió en que las disculpas del Rey eran necesarias pero dejó claro que no puede dar "lecciones de ética" a nadie y sí tiene que dar ejemplo con su actuación "diaria y cotidiana".

Lara señaló que el hecho de que pidiera perdón no es un gesto de humildad que deberían seguir otros dirigentes políticos porque él no es ningún ejemplo de moralidad. Y no lo es porque, según manifestó el líder de IU, si el monarca sabía desde 2005 de las supuestas actividades irregulares de su yerno Iñaki Urdangarín tenía que haberlo puesto en conocimiento de la Justicia.