La familia Bernadotte está otra vez de enhorabuena. El príncipe Carlos Felipe de Suecia y su esposa, la princesa Sofía, han sido padres de un niño cuyo nombre se desvelará hoy tras el Consejo de Estado convocado por el rey Carlos Gustavo. El bebé, que vino al mundo el martes a las 18:25 en el hospital Danderyd, el mismo en el que nació su madre, pesó al nacer 3,595 lilos y midió 49 centímetros.

Ni Carlos Felipe ni su esposa quisieron saber el sexo de su primogénito durante el embarazo, por lo que ha sido una sorpresa para ambos, más aún cuando todos los rumores apuntaban que sería una niña después de que la princesa fuera vista hace unas semanas comprando algunos conjuntos en color rosa. "Para mí y para mi mujer es un gran día, de muchos sentimientos", declaró el joven padre ante los periodistas al tiempo que recalcaba que su hijo tiene tanto sus rasgos como los de Sofía. "Esto es lo más grande que nos ha pasado. Lo que siento es no poder expresarlo con palabras", añadió.

El hijo de Carlos Felipe de Suecia es el quinto nieto de los reyes Carlos Gustavo y Silvia y ocupa también la quinta plaza en la línea de sucesión al trono, por detrás de su tía Victoria, de los dos hijos de ésta (Estelle y Óscar) y de su propio padre.

De momento, la reina Silvia no conoce a su nuevo nieto, ya que desde principios de semana se encuentra en Nueva York, donde asiste a unas ponencias de la ONU. En cualquier caso, se espera que sí acuda mañana al Te Deum (acción de gracias) que tendrá lugar en la capilla del palacio real, en el que estará presente toda la familia real sueca.