Zidane, el hombre perfecto para Mango
El astro francés repite como imagen de la firma catalana consolidándose en su faceta de modelo
Es un tipo de pocas palabras pero lo que piensa lo defiende hasta el final. Zinedine Zidane tiene 43 años y no se anda con chiquitas, hace en su vida aquello que realmente le apetece. Así, no tuvo ninguna duda en decirle sí a Mango cuando le propusieron repetir como imagen de su línea masculina. El galo se siente bien posando, no se preocupa en exceso de su imagen pero se gusta, es por ello por lo que cada vez compagina mejor su faceta de modelo con la de entrenador de fútbol. Y es que si bien el deporte es su vida, sentirse 'mimado' y respaldado por una firma como la catalana no le desagrada en absoluto, más bien lo contrario. Él se ve y se siente el hombre perfecto para Mango. Y lo es.
En el mítico estudio Pin Up de París ha presentado el ex futbolista la nueva colección otoño/invierno de Mango Man, que apuesta por tonos indispensables como el beige, el camel, los tostados y los caquis, así como por el azul índigo y la gama de grises. Entre las prendas más destacadas llaman especialmente la atención las parkas, camisas a cuadros al estilo más brit y una gran variedad de estructuras de prendas de punto con pantalones de aire jogging. "Mi estilo lo definen prendas con las que me sienta cómodo", se apresuró a decir el francés a los medios allí presentes. Zidane jugaba en casa y se le notaba. Con una tranquilidad pasmosa y en su idioma natal aseguró que sus looks se componen de básicos que marquen la diferencia y que nunca se pone nada que no le guste. "Yo soy sincero con lo que soy, cada día", dijo. Más Zinedine que Zidane en esta ocasión, confesó que no le presta demasiada atención a su imagen, asegurando que "si caes en eso, dejas de ser tú mismo".
El deportista se deshizo en halagos para su familia, y dijo a la prensa que tanto sus hijos como su esposa le dan "equilibrio" a su vida. Un bienestar que repercute también en su carrera profesional, a la que da muchísima importancia. "Cuando estoy trabajando pienso en mi familia y cuando estoy con mi familia pienso en el trabajo. Es esa alquimia la que me ayuda a mantenerme", afirmó. Y concluyó: "Sentirse bien con lo que uno hace a diario es el secreto de la felicidad, y de ese equilibrio que defiendo".
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