En nombre de la tortilla de patatas se cometen fuera de España auténticos crímenes, contra el buen paladar, se entiende. Sobre la tortilla se dan muchas vueltas, cuando en realidad sólo hay que darle una. Durante la guerra civil española, sin ir más lejos, a falta de patatas y huevos, se hacía una con harina y naranjas. Increíble, pero cierto. Su nombre: ‘tortilla de patatas simulada’, o ‘tortilla de guerra’. Cualquier parecido con el sabor real es pura casualidad. Pero las peores revisiones de nuestra clásica tortilla española vienen de fuera de nuestras fronteras. El chef José Andrés criticó una vez la receta de una norteamericana que, en realidad, lo que había cocinado eran unas patatas revolconas o meneás –como se dice tradicionalmente– con diversos ingredientes, ya sea chorizo, pimiento o cebolla. “Eso no es tortilla de patatas, señora”, le dijo uno de nuestros cocineros con más proyección en Estados Unidos.La tortilla de patatas, de puro simple, ha sufrido numerosos ultrajes a manos de cocineros que creen que le hace falta algo más. O le añaden chorizo, verduras y hierbas sin pudor, o la estropean elaborándola en el microondas, asándola al horno y mil perrerías más. El propio José Andrés, sin ir más lejos, popularizó en su día una tortilla con patatas chips, es decir, de paquete. Bueno, es una versión, aunque resulte dudoso que mejore la de toda la vida. Sin duda la versión más lisérgica es la llevada a cabo por el muy famoso (en su país) chef indio Sanjeev Kapoor. En una mínima cantidad de aceite sofríe cebolla, chile y pimiento verde con unas pocas patatas cocidas. Lo más triste es que usa cinco claras de huevo con una sola yema para cuajar la tortilla, y no contento con esto, la mete en el horno nada más y nada menos que 20 minutos a 180 grados. En cuanto a reinvenciones desafortunadas la tortilla, la pobre, se lleva la palma. Cubierta de jamón y sin patatas la hace el chef austríaco Wolfgang Puck. La web estadounidense Yummyntastyy, que cuenta con más de 300.000 seguidores, la recomienda con chorizo, leche y paprika. Los cocineros y hermanos ingleses Chris y Jeff Galvin la cocinan como una quiché. ¿Alguien reconoce nuestra tortilla de patatas?