Irán recibe 8.000 millones de dólares bloqueados en EEUU tras el pacto nuclear

Las autoridades iraníes confirmaron ayer que se han liberado alrededor de 8.000 millones de dólares en activos en cuentas iraníes en EEUU que estaban congelados hasta el domingo, tras la firma del acuerdo nuclear en Ginebra con el Grupo 5+1.

"Se han liberado unos 8.000 millones de activos en EEUU", confirmó ayer a la agencia local ILNA el portavoz de la Administración iraní, Mohamad Baqer Nobajt. Según afirmó, los activos están ya disponibles para su uso, pero Teherán no los convertirá todos en moneda local.

El portavoz se felicitó por el acuerdo alcanzado el domingo con EEUU, Rusia, China, Francia, Alemania y el Reino Unido que, aseguró, tendrá un efecto positivo en la economía iraní y dará paso a una reducción progresiva de las sanciones internacionales sobre la República Islámica.

El precio del barril de petróleo experimentó ayer fuertes descensos a raíz del acuerdo.

La UE trabaja ya para levantar parte de sus sanciones a Irán y espera que el proceso pueda culminarse como muy tarde en enero. "El trabajo ya ha empezado para implementar este primer paso del acuerdo", señaló ayer el portavoz comunitario de Exteriores Michael Mann.

Según Mann, los expertos europeos deben preparar enmiendas a la legislación comunitaria sobre sanciones, que deben pasar por los canales habituales para, finalmente, recibir el visto bueno de los ministros de los Veintiocho.

"Esto ocurrirá tan pronto como esté listo. Puede ser diciembre o enero, depende de cuánto tiempo lleve el proceso legislativo", dijo.

El levantamiento de las sanciones, en todo caso, se coordinará con Irán para asegurarse de que ambas partes implementan lo pactado en Ginebra.

El histórico pacto congela parcialmente el programa nuclear iraní durante seis meses mientras se negocia un acuerdo definitivo que ponga fin a las inquietudes sobre sus ambiciones atómicas. Irán deberá detener el enriquecimiento de uranio superior al 5%, diluir las reservas existentes al 20%, no aumentar las reservas al 3,5% y someterse a controles sin precedentes de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA). A cambio, las naciones se comprometen a no imponer nuevas sanciones y a permitir a Teherán repatriar parte del dinero procedente de las exportaciones de petróleo bloqueado en el extranjero. Además, se levantan las sanciones sobre las exportaciones, se permite la importación de repuestos de aviación y se abre un "canal humanitario" para la entrada de alimentos, productos agrícolas, medicinas o equipos médicos.

La decisión final sobre la participación de Irán en la conferencia de paz para Siria se tomará en las próximas semanas, antes de fin de año, dijeron ayer fuentes que participan en una reunión preparatoria de este evento, con el que se espera detener la guerra civil en el país árabe. La presencia de Irán, principal aliado del régimen sirio de Bachar al Asad, se ha erigido en uno de los principales obstáculos para la conferencia Ginebra-2.