La Paquera, diez años de un volcán que dejó huella
EL CADF homenajea a la cantaora jerezana en el X aniversario de su fallecimiento con un programa de actos que repasa su trayectoria e incluye un recital de Jesús Méndez
"La Paquera de Jerez/torrente de surtidores, va cantando por España/coplas de vivos amores y España se estremece con sus dones cantaores" (Cante del tablao, Manuel Ríos Ruiz). Y lo hizo desde que era una niña. Con 4 años su padre la llevaba a cantar a las fiestas que se organizaban en las bodegas jerezanas. Y no paraba de irrumpir y de dejar a sus oyentes boquiabiertos. Pero la naturaleza estalló definitivamente en ciclogénesis flamenca cuando en 1959, en el madrileño Corral de la Morería, la jerezana, nacida 25 años antes, ya no cesó de brillar. Ni tan siquiera su muerte, el 26 de abril de 2004, ha callado su voz. En este décimo aniversario de su subida a los Altares del Duende, el Centro Andaluz de Documentación del Flamenco (CADF) la homenajeó ayer, a Francisca Méndez Garrido, por ser "uno de los pilares fundamentales" del cante jerezano. Un acto en el que se recordaron su vida y su obra y que contó con la presencia de "destacadas personalidades" del mundo del flamenco. La cita, organizada por el Instituto Andaluz del Flamenco y el programa Flamenco y Universidad, de la Secretaría General de Universidades, Investigación y Tecnología, se desarrolló en la sede del CADF.
El flamencólogo Manuel Ríos Ruiz, autor del libro La Paquera de Jerez, genio y figura del cante, ofreció una conferencia con el mismo título, en la que habló de las cualidades artísticas y personales de La Paquera al interpretar los estilos como la seguiriya, las bulerías, pasando por las soleás, tangos, fandangos... También hizo una glosa de su trayectoria artística partiendo de esa presentación en Madrid, de sus temporadas en los tablaos, las giras teatrales con espectáculos por todos los coliseos del país. Ríos Ruiz también hizo alusión a las actuaciones de la artista en el extranjero, en Francia, entre otros países europeos, y en el Teatro Nacional de Tokio.
Pero la sombra de La Paquera era muy alargada, y alcanzó también el cine y la televisión, con su película, por ejemplo Los duendes de Andalucía, o su primera aparición en una serie con Rito y geografía del cante, en varios de sus capítulos, en la que mostraba "toda su dimensión artística, muy especialmente, en la saeta", aseguró el flamencólogo. Asimismo, repasó su discografía en distintas firmas y las grabaciones de la Caja de Ahorros con Así canta nuestra tierra en Navidad y sus discos por sevillanas. Terminó Ríos con los versos que abren esta página, de 1972, cuando estaba La Paquera en el tablao Los Canasteros, de Madrid.
Tras él, comenzó una mesa redonda que, bajo el título Perfil humano y artístico de La Paquera reunió a Maite Pulpón, Tomasa Guerrero La Macanita, Niño Jero Periquín, Manuel Moreno y Juan Pedro Aladro, entre otros, y fue moderada por el periodista Fran Pereira. En ella, los integrantes relataron anécdotas vividas con la artista, como cuando fue a Francia y estaba antojada de pescaíto frito, "y allí sólo ponían pato. Y ella decía y lloraba que de pato nada, que se acordaba de su pato Felipe", contaba Macanita, que la calificó de "gran persona, gran artista, con una gran sensibilidad. Una diosa". Una mujer "que le daba su sitio a todo el mundo, y a mí me dio buenos consejos. Como ese de: tú pide, chocho, pide. Antes de actuar el dinero por delante", cuenta entre risas Tomasa Guerrero. Le siguieron declaraciones como las de Niño Jero Periquín, y su orgullo de haber tocado la guitarra a La Paquera, y recordó que el arte de la jerezana era tan grande que nadie quería cantar después de ella en los festivales. De un fuerte carácter, en el cante y como persona, "y cualquiera le decía que no a unos polvorones en pleno agosto sevillano en las grabaciones de Así canta...". Eso sí, una profesional, "que sabía más de mesas de mezcla que cualquier técnico de estudio", recordaba con cariño Aladro.
El concurrido acto se cerró con el recital Honores a La Paquera de Jerez, con el cante de Jesús Méndez, criado en la saga de la cantaora, y la guitarra de Manuel Valencia. Asimismo, el CADF expone una muestra de sus fondos dedicada a La Paquera y ha preparado una programación especial de proyecciones protagonizada por la cantaora jerezana. Diez años después de un volcán que dejó huella.
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