Reeducando a Philip

Una cita para el verano. Comedia dramática, Estados Unidos, 2010, 87 min. Dirección: Philip Seymour Hoffman. Guión: Bob Glaudini. Fotografía: W. Mott Hupfel III. Música: Grizzly Bear y Evan Lurie. Intérpretes: Philip Seymour Hoffman, Amy Ryan, John Ortiz, Elizabeth Rodriguez, Richard Petrocelli. Cines: Avenida.

Siempre tan sensibles a la calidad y al arte, nuestros distribuidores han decidido estrenar en España, cuatro años después de su fecha original, la única película que dirigió Philip Seymour Hoffman, con el cadáver aún caliente en la memoria de sus numerosos admiradores, que han crecido, qué duda cabe, después de la trágica muerte del gran actor el pasado febrero.

Más allá de este insignificante detalle, Una cita para el verano no pasará a la posteridad como un filme importante, ni siquiera revelador del carácter profundo (y complejo) de su director y protagonista, aunque ahora queramos ver en el perfil de su personaje los rasgos depresivos y adictivos del genial intérprete de Happiness o The Master.

Comedia romántica de paisaje urbano neoyorquino (o sea, vista mil veces) y esquema teatral (basada en la pieza de Bob Glaudini), la cinta de Hoffman apuesta las formas discretas de su pequeño formato al mensaje de superación y buen rollito que emana del periplo de su protagonista, un tipo excéntrico y rarito cargado de limitaciones sociales al que sus amigos se empeñan en sacar adelante para conseguirle un amor que lo redima.

El previsible trayecto del filme nos lleva por las etapas de reeducación sentimental de un personaje al que Hoffman hace suyo con grandes dosis de esa transparente humanidad física y anímica marca de la casa, acompañado de seres igualmente frágiles o en la cuerda floja para conformar un cuarteto destinado a vivir en paralelo su particular catarsis emocional.

En sus mejores momentos, la cinta deja ver ciertas intensidades cassavetianas, aunque son pocos, por desgracia, escondidos entre las clásicas estampas de lírica indie y las canciones de Grizzly Bear o Fleet Foxes.