La Zaranda se adentra en el poder y la locura con 'Futuros difuntos'

La compañía La Zaranda vuelve a pisar hoy el escenario del Teatro Lope de Vega, a las 21:00, con su último trabajo titulado Futuros difuntos, sin duda, un montaje lleno de metáfora y alegoría que se adentra en el mundo de la locura y del poder.

El último proyecto de la compañía jerezana, cuyo sobrenombre es Teatro Inestable de Andalucía la Baja, presenta, según el autor y dramaturgo de cabecera de este grupo, Eusebio Calonge, "una metáfora del mundo como manicomio" en el que el hombre aparece como un ser solo ante su destino. Y lo hace a través de un argumento que gira en torno al patio de este lugar en el momento en el que su regente fallece. A partir de este instante se establece "la lucha por el poder entre los internos" a los que dan vida los actores Gaspar Campuzano, Francisco Sánchez y Enrique Bustos. Ellos serán los encargados de meterse en el papel de tres locos en fase terminal que ocuparán el lugar que ha quedado vacante para aparentar normalidad. Con una escenografía que emplea material hospitalario para representar a sus congéneres "se refleja muy bien las grandes dictaduras del siglo XX, con un mundo metalizado, de hierro y sin escapatoria", aseveró Calonge.

En esta obra, que se estrenó en el Teatro Sorano de Toulouse en noviembre de 2008, La Zaranda "se mueve en libertad dentro de esta metáfora cuyo límite entre la locura y la razón es muy delgado y confuso". Uno de los actores, Francisco Sánchez, director además de la compañía -bajo el nombre de Paco de la Zaranda-, aseguró que "no es una obra que cuente una historia porque nosotros hacemos teatro de sensaciones". Futuros difuntos "habla de nosotros porque siempre hemos dicho que los trabajos que hacemos son como nuestros propios hijos ya que no separamos nunca lo que hacemos de los que somos y sentimos".

Y, para ello, esta compañía que lleva más de 30 años encima de los escenarios huye de nuevo de la superficialidad gracias a un trabajo cuyas constantes son, entre otras, el uso simbólico, el expresionismo visual y la creación de personajes límite. En Futuros difuntos La Zaranda vuelve a realizar una poética teatral "en la que queremos que sea el propio público el que saque sus propias conclusiones", indicó su director.