Menos luces y más ambiente

El año 2011 fue un punto de inflexión en los ayuntamientos, más que 2008, en el que se coloca el inicio de la crisis. Tras las elecciones municipales, muchos gobiernos admitieron que apenas había ingresos para lo básico y fue el del verano de las ferias anuladas y el de la Navidad sin luces en tantos pueblos. Con los planes de ajuste y para suplir ese aspecto se comenzó a tirar de imaginación, a apelar a los colectivos ciudadanos y a buscar en almacenes municipales exornos arrumbados. Cuatro años después y como suele pasar -se dice que las crisis son una oportunidad para reinventarse-, las cosas van cambiado. No sólo porque haya más para gastar, sino porque han dado lugar a otra concepción. Cuando se piensa en el papel que debe jugar un Ayuntamiento para dinamizar de alguna forma la ciudad en esos días, las luces, en la mayoría de los casos, no son ya lo más importante, aunque se van recuperando: se generalizan concursos, sistemas de bajo consumo, control de las horas de encendido y apagado. Lo esencial son las actividades, en las que muchas veces el Ayuntamiento se limita a facilitar que una asociación instale un mercadillo solidario, haga una representación o un taller para niños, se coordinan rutas y exposiciones. Se busca la participación, para que la gente se anime a salir y, sobre todo, para alentar el comercio local.

Uno de los municipios de referencia es Carmona. Durante las Navidades de 2011 y 2012, el Ayuntamiento no pudo colocar luces. Luego las recuperó, con un gasto de unos 20.000 euros, casi un 40% menos. Pero la apuesta estrella, ahora, es el programa Carmona en Navidad, que celebra su tercera edición en 2015 y que aglutina exposiciones, conciertos, conferencias, mercados, actividades lúdicas o un concurso de escaparates, que se aglutinan ahora con el objetivo de "dinamizar", de "darle aún más vida" al municipio en esos días. No hay mapping, sí proyecciones en la iglesia de San Pedro.

Ese cambio de concepción parece haber calado no sólo en los responsables públicos, también en los vecinos que, por lo general, se implican más. Siguiendo con Carmona, ese primer año sin luces navideñas, el Consistorio colocó la estructura de un árbol de Navidad frente al Teatro Cerezo, que decoraron los niños, con tan buena acogida que comerciantes y vecinos de otros barrios y plazas lo han reclamado para hacer lo propio: en la Plaza de San Fernando, en la Alameda de la calle Jara o en San Antón, en este caso, con la implicación de la Peña la Giraldilla, la que organizada históricamente la Cabalgata de Reyes Magos en el municipio. El Ayuntamiento ayuda a veces con la presencia de la banda de música, sesiones de cuentacuentos o con hilo musical.

En Camas, la iluminación, como en todos estos años, se seguirá ciñendo a la Plaza del Ayuntamiento y a la contigua de la Iglesia. Entre la Feria y la Navidad, el Consistorio no se gasta más de 10.000 euros y descarta aumentar la partida. Pero también aquí se intenta "compensar" ese hecho con "más participación". El año pasado, una asociación adornó o "abrigó" con coloridas mantas tejidas a mano los árboles de la Plaza del Ayuntamiento. Este año, se intentará implicar a los niños en esa decoración, con talleres en la propia plaza, que se concentrarán el 19 de diciembre y la colaboración de asociaciones de padres, de hermandades que realizan actividades con fines solidarios y un concierto de la recién estrenada Banda Ciudad de Camas. El Ayuntamiento no se gasta más de 4.000 euros en acondicionarlo todo.

En Pilas, el nuevo gobierno local sí que va a apostar por más luces, con la colocación de figuras en tres dimensiones en "puntos emblemáticos" y en las rotondas de entrada. Aunque también se ha contactado ya con centros educativos y las asociaciones de madres y padres para que los escolares se impliquen elaborando adornos a partir de materiales reciclados que se colgarán en zonas aledañas a los centros. Además, se trabaja con las asociaciones locales para elaborar un programa de actividades por la Navidad en La Algaba, donde el presupuesto en luces ya se redujo en un 76% a partir de 2009. Como novedad, se ha sacado ahora también un concurso público para los próximos cuatro años.

En San Juan de Aznalfarache, la mayoría del alumbrado lo constituyen elementos de elaboración propia en los últimos años, salvo la iluminación de la Avenida 28 de febrero, que se estrena en unos días y de la que se encargará una empresa que se ha contratado, por algo más de 3.000 euros, este año. Pero, al preguntar por la Navidad en San Juan, el Ayuntamiento pone el acento en el peso que en ésta ha adquirido el teatro Romero Sanjuan, inaugurado recientemente tras décadas de vicisitudes: acogerá cine de Navidad para escolares y adultos, un certamen de campanilleros y de canciones y una zambomba flamenca organizada por la Asociación de Amigos de la Cabalgata de Reyes Magos. El Centro Arqueológico se aprovechará el 16 y 17 de diciembre para instalar belenes vivientes de los colegios y, la colaboración con empresas y el patrocinio de eventos -que también van al alza-, permitirá que durante tres días se desarrolle un certamen escolar de Campanilleros en El Corte Inglés.

En otros municipios, como Utrera, todavía no se tiene cerrado el plan en ese sentido, pero también se apuesta por una "programación integral" que incluirá exposición de belenes y una pista de patinaje. No obstante, en el caso de esta localidad sí que va amentar un 20% lo que se venía gastando en alumbrado en los últimos años, para llegar a las avenidas María Auxiliadora, San Juan Bosco y General Giráldez, a las calles Extremadura, Murcia, Santiago Apóstol y Real y a la Plaza de la Trianilla, además de a los campanarios de Santiago, Santa María, San Francisco y Consolación. Desde el Ayuntamiento se insiste en que la intención es "promocionar Utrera para que los vecinos hagan sus compras de Navidad en el municipio" y atraer a vecinos del entorno y la capital. En Gines hace años ya que, más que el encendido de las luces, el momento esperado de las vísperas de la Navidad es un mercado, que se celebrará este año entre el 11 y el 13 de diciembre, al que cada vez se suman más colectivos y comerciantes del propio municipio y del Aljarafe.

En lo que respecta a los grandes municipios del entorno de la capital, en la segunda ciudad de Sevilla, Dos Hermanas, las luces de Navidad hace mucho tiempo que no son cosa del Ayuntamiento, salvo algunos pequeños adornos que coloca en su propia fachada y en su entorno. Es cosa de la Federación de Comerciantes Nazarenos (Fenaco), a la que el Consistorio, eso sí, da una subvención anual para ayudar. El Ayuntamiento colabora en algunas otras actividades, como el certamen de villancicos, cediendo el teatro municipal.

En La Rinconada, otro de esos ayuntamientos sin problemas económicos, la apuesta es mucho más fuerte: asume la iluminación y organiza además un circuito de 17 belenes, de colectivos y particulares, que arranca el 15 de diciembre. Aunque el empeño es una importante campaña para alentar el comercio local, con promoción en redes sociales, a través de folletos y cuñas publicitarias y reparto de bolsas de promoción. También con iniciativas para hacer más atractivo el paseo por las principales áreas con negocios, en las que se van a colocar este año abetos decorados de gran porte, habrá pasacalles, zambombas y degustación de chocolate y dulces típicos. Todo para que la gente se eche a la calle y, también en esas fechas, llene de vida sus pueblos.