El Hospital Virgen Macarena se convertirá en los próximos meses en centro de referencia en Andalucía para tratar graves tumores en el riñón que afectan a dos vasos sanguíneos (vena renal y vena cava) y que incluso pueden alcanzar al corazón. El cáncer renal es el tercer tipo de tumor más frecuente en el sistema urinario y su pronóstico es nefasto si no se elimina a tiempo.

Cuando esta grave enfermedad ataca a las venas renal y cava, el enfermo requiere de una compleja intervención quirúrgica que consiste en extirpar el riñón y toda la zona dañada por el cáncer, cuando aún no se han producido metástasis (diseminación de las células cancerosas hacia otros tejidos y órganos). "Para realizar esta compleja operación es necesario un equipo multidisciplinar muy entrenado compuesto por urólogos y cirujanos cardiovasculares", explica el doctor Jesús Castiñeiras, jefe del servicio de Urología en el Virgen Macarena.

El Hospital Universitario es el único centro regional, de momento, en el ámbito andaluz que cuenta con un programa sistematizado y multidisciplinar para tratar a estos pacientes mediante un protocolo creado por los urólogos, dirigidos por Castiñeiras, y los cirujanos cardiovasculares, los doctores José Miguel Barquero y Omar Haraji. Hasta la fecha, 11 pacientes se han sometido a esta complicada operación y los resultados son "muy buenos", comenta Castiñeiras. Durante la intervención, los cirujanos obstruyen (clampan) la vena cava para impedir que circule la sangre en la zona a operar y evitan, de este modo, hemorragias. "Después procedemos a abrir la vena para extraer el trombo canceroso", añade el especialista. Con esta cirugía radical los especialistas logran eliminar el cáncer y, con ello, mejora la esperanza de vida del enfermo. La supervivencia del paciente a los cinco años gira entre el 30% y el 72% de los casos, gracias a esta operación. Cuando no se aplica esta terapia agresiva, la supervivencia se reduce al año para estos enfermos.

El cáncer de riñón es una enfermedad muy silente, que apenas presenta síntomas -puede manifestarse con sangre en la orina, dolor y fiebre- y suele detectarse de manera incidental cuando el paciente se realiza una prueba diagnóstica (una ecografía) por otra dolencia. Es más común en personas entre 50 y 70 años y tiende a ser más frecuente en hombres. Cuando la enfermedad sólo afecta al riñón la terapia es más sencilla y consiste en la extirpación del órgano. La complejidad sobreviene cuando el cáncer también afecta a los vasos sanguíneos y/o al corazón. En estos casos más graves, con trombo en cava, es necesario que los urólogos trabajen codo con codo con los cirujanos cardiovasculares en el quirófano para extirpar la zona dañada por la enfermedad.

El Hospital Virgen Macarena ya ha iniciado los trámites en la Consejería de Salud y el Ministerio para convertirse en centro de referencia para solucionar los casos más complejos en Andalucía. En tres años (2007 a 2009), en el ámbito andaluz se ha detectado 2.032 casos de tumores renales. Los casos más graves que afectan al riñón y a las venas renal y cava son menos frecuentes, el 10% del total de los tumores renales y "en el Macarena podemos asumir los casos que se dan en el ámbito andaluz", añade el responsable de Urología en el hospital .

"Un equipo multidisciplinar, formado por urólogos y cardiovasculares, no tiene sentido y no es necesario que exista en todos los hospitales", incide el experto, ya que "la incidencia del tumor renal con trombo en vena cava es baja", añade. Por ello "tener un centro de referencia para esta patología es colaborar y compartir experiencia con compañeros de otros hospitales, es optimizar los recursos públicos", comenta. "En el momento actual, podemos ofertar de manera inmediata y efectiva nuestra experiencia al resto de los hospitales", concluye Castiñeiras.

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