De Nueva York a Sevilla con la banda de las Cigarreras

Contrapunto

Miércoles Santo. Ricardo Suárez propone que la Esperanza de Triana salga de San Jacinto y las Cigarreras de la Capilla de los Marineros

Ricardo Suárez junto a su Diana Cazadora.
Ricardo Suárez junto a su Diana Cazadora. / José Ángel García
Francisco Correal

06 de abril 2023 - 06:00

Es Domingo de Ramos. Sigamos la Flecha de Dios. Es 10 de abril. Ese día de 1976 el cardenal Bueno Monreal bendijo la capilla de la Estrella que tres años antes, por acuerdo de cabildo de 25 de febrero de 1973, había dejado de ser casa-hermandad para acoger a una cofradía que hasta entonces hacía su salida procesional desde el convento de los dominicos en la calle San Francisco.

La banda de las Cigarreras. No es la música y si lo fuera sería una música de tiempo y de nostalgia. Es la banda en un sentido topográfico, casi marismeño. La vista de las Cigarreras desde la Diana cazadora esculpida por Ricardo Suárez (Sevilla, 1969). Está en el muelle de Nueva York, ciudad con la que este artista sevillano mantiene un idilio ético y estético, un verdadero flechazo. Su Diana se inspira en el remate de la Giralda neoyorquina de corta vida, en una escultura que diseñó August Saint-Gaudens, artista norteamericano de origen irlandés. En 2005, el mismo año que hace el cartel de la Macarena, viaja a Nueva York y allí empieza a darle vueltas al diseño de la portada de Feria del año siguiente, primera que se hizo mediante concurso. Hay un precedente familiar. Su bisabuela paterna, para librar a su abuelo Manuel de la guerra de África, lo manda en un barco a Nueva York. Ricardo buscó los documentos migratorios de quien como tantos llegó a la isla de Elis y dio con la pista: rebelde como lo sería su nieto, el emigrante, al ser obligado a nacionalizarse norteamericano, se marchó a La Habana, donde dejó su impronta en el Centro Asturiano. Volvió a España en plena Guerra Civil. Y el nieto que podía ser cubano salió sevillano.

Todo ocurre en la segunda mitad de los años sesenta. Fundada en 1563, las primeras reglas de la hermandad de las Cigarreras datan de 1569. Bailan las cifras y el 9 de febrero de 1965 se instala en la nueva Fábrica de Tabacos. El 23 de junio de 1968, Francisco Franco inaugura el puente de Los Remedios. Se trae al Gobierno a Sevilla. El puente se llamará hasta el año 2000 puente del Generalísimo. Fue un mes después del mayo francés, dos meses después del abril sevillano. Y el 10 de noviembre de 1969, en el Hospital de las Cinco Llagas, hoy sede del Parlamento andaluz, nace Ricardo Suárez, hijo de Dolores Guadalupe López Rodríguez, a quien le dedica la Diana, y de José Antonio Suárez, que se había ido a ver un partido del Sevilla y a la vuelta se encontró con el niño. "En la toma de posesión de Juanma Moreno recorrimos el antiguo hospital. En una zona que todavía pone Paritorio nací yo. Era un despacho de Izquierda Unida o Podemos y tenía un cuadro mío".

La banda de las Cigarreras. El día que se inauguró la Diana, en su interior se guardaron dedicatorias al contratista y el fundidor, "la fundió Marcelo, que ha fallecido hace poco", y sendas estampitas de la Virgen de la Salud de san Gonzalo y del Nazareno del Silencio. Sus dos hermandades, la primera por tradición familiar, la segunda motu proprio. En la antigua Fábrica de Tabacos se instaló la Universidad y allí está la capilla y la casa-hermandad de los Estudiantes. "Le tengo mucha devoción porque fue mi primer éxito profesional, el cartel del Pregón Universitario de 1994". Tenía 24 años. Lo pronunció su tocayo el oftalmólogo Ricardo Reguera. Gustó mucho y siendo alcalde de Sevilla Alejandro Rojas-Marcos y delegado de Fiestas Jaime Bretón le encargaron el cartel del Corpus para el año siguiente. Pintó el Niño Jesús del Sagrario, el de Martínez Montañés, vestido de seise.

El niño macareno, nacido en las Cinco Llagas, vuelve a Triana. En la nueva Fábrica de Tabacos, que ya es antigua, empezó a salir hace casi medio siglo la hermandad de las Cigarreras. El pintor dibuja un posible futuro panorama ante los proyectos en los terrenos de Altadis. "Lo primero que tendrá que salir será la hermandad. Las Cigarreras tiene una capilla en propiedad en los Terceros. Lo ideal sería que la Esperanza de Triana se fuera a san Jacinto y las Cigarreras se instalara en la Capilla de los Marineros". Sería muy coherente estando como está en la calle Juan Sebastián Elcano, el marinero por antonomasia, donde vivió el único sevillano que ganó el Planeta (Manuel Ferrand).

De Alejandro, el alcalde que le encargó el cartel del Corpus, a Antonio Muñoz, actual regidor del destino de la ciudad, el pintor propone su particular PGOU cofrade. "San Jacinto podría ser un segundo Salvador de Sevilla. De allí salieron pitando la Estrella y la hermandad del Rocío de Triana. En Triana se fundó las Aguas y en la calle Betis la hermandad de los Gitanos. La primera que cruza el puente de barcas es la de la O, porque las hermandades de Triana hacían estación de penitencia en la iglesia de Santa Ana".

La singularidad de Triana, la necesidad hecha virtud, se debía a ese "aislamiento secular" de un barrio que era en realidad un archipiélago. Personalidad extensible a Los Remedios, sede geográfica de las Cigarreras. El barrio de Silvio, de Gonzalo García Pelayo, de Benito y Máximo Moreno. "Los Remedios es la respuesta a un crecimiento de la prole, una alternativa habitacional se dice ahora, en lo que fue el meandro de Los Gordales, que era el verdadero río Guadalquivir". Con la Exposición del 29 se hace la nueva Corta en una zona delimitada por los Tejares, alusión explícita al monocultivo artesanal y ceramista: Ramos Rejano, Mensaque, Santa Ana, Montalván, Pedro Navia. "La familia de Aníbal González tenía una fábrica de solería hidráulica para decorar el interior de los pabellones".

La Esperanza de Triana a San Jacinto y las Cigarreras a la Capilla de los Marineros. La flecha de la Diana apunta fino y alto. "Sería una auténtica revolución. Tanto don Juan José (Asenjo) como don José Ángel (Saiz Meneses) saben del potencial de las cofradías en el mantenimiento de las parroquias".

El niño macareno es cofrade de Triana y del centro. "Mi padre fue de los pioneros de la Virgen de la Salud en 1954". San Gonzalo por familia. Lo del Silencio fue distinto. "Con catorce años me presenté en san Antonio Abad con el uniforme del colegio. Quería ser hermano y me dijeron que tenía que llevar la firma de dos personas de la cofradía. Allí mismo me firmaron nada menos que Antonio Delgado-Roig, el arquitecto, y Joaquín Pérez, el propietario de Bordados Santa Bárbara".

De blanco los lunes, de ruan cada Madrugada. Fue costalero con las dos, "nunca fui sacapasos. El kostalfitness me parece tan lamentable como la trompetería dodecafónica de algunas bandas". Formó parte de la cuadrilla de Salvador Dorado El Penitente cuando la mitad eran profesionales. Prepara una exposición para otoño, una actualización del discurso de Valdés Leal para la Fundación Cajasol, "un compendio de modernidad, religiosidad y paisaje con la muerte como hilo conductor. Casi nadie entendió mi calavera en el cartel de Fiestas Primaverales. Hoy estás divirtiéndote y mañana puedes estar en el hospital o en el tanatorio".

stats