Los Obispos del Sur han conocido en su última reunión los criterios que han puesto en común los delegados diocesanos de Hermandades para regular la creación de nuevas hermandades, las salidas extraordinarias y las coronaciones canónicas. Estas directrices serán ahora asumidas por cada diócesis que las aplicará según su propia idiosincrasia, por lo que se descarta la elaboración de una normativa común para toda Andalucía. El coordinador de este trabajo ha sido el delegado diocesano de Sevilla, Marcelino Manzano.

"Los criterios son más o menos lo que ya estamos aplicando en Sevilla. Depende ahora de cada obispo convertirlo o no legislación, pero se descarta que haya una normativa común por las distintas particularidades", ha explicado Manzano a este periódico

Las diócesis que menos regulación tienen actualmente son las de Granada, Guadix y Jaén. Málaga, por su parte, lo tiene todo muy reglado. En el caso de Sevilla, existe una normativa que regula las salidas extraordinarias, pero no hay nada con respecto a las coronaciones canónicas.

Los delegados episcopales de Hermandades, en una reciente reunión.

Creación de nuevas hermandades

La regulación de la erección canónica de nuevas hermandades ha conllevado una importante reflexión previa por parte de los responsables diocesanos. "Es curioso ver como el crecimiento de las solicitudes para crear nuevas hermandades convive con un aumento de la secularización y un descenso en la práctica de la fe", advierte Manzano.

En la provincia de Sevilla, por ejemplo, entre grupos de fieles y agrupaciones parroquiales, hay alrededor de cien solicitudes esperando, aunque por los dilatados plazos, un 30% o un 40% de estos grupos que esperan tienen una baja actividad.

Los obispos señalan una serie de directrices para aprobar la creación de nuevas hermandades, como estar atentos a que responda a una verdadera necesidad pastoral; que el grupo cuente con un amplio recorrido que haya permitido cimentar el compromiso eclesial o el caritativo; o que la nueva fundación no responda a una escisión de otra hermandad.

La Virgen del Rosario de la Hermandad de la Milagrosa, última hermandad aprobada en Sevilla capital.

"A veces no es necesario que se acabe erigiendo en hermandad, pueden funcionar como grupo parroquial. En cualquier caso, los plazos para la aprobación de la hermandad dependen de su propia evolución. Hay que escuchar al vicario episcopal, al arcipreste, etcétera", sostiene Manzano.

Salidas extraordinarias

Los delegados diocesanos son conscientes de que se está produciendo en toda Andalucía un aumento de las procesiones no contempladas en las reglas. Por ello, la primera premisa es que las que no estén contempladas por escrito deben contar con la autorización correspondiente. En el caso de darse el plácet, se velará especialmente por evitar los excesos, sobre todo en los horarios e itinerarios. Debe imperar la mesura.

Los criterios principales para autorizar una salida es que se trate del aniversario de la erección canónica o de la coronación canónica, en su caso, y siempre en múltiplos de 25. También se autorizarán procesiones de un gran interés eclesial o singularidad pastoral. 

"Cualquier otro tipo de procesión debe estar muy justificado", advierte Manzano.

Coronaciones canónicas

La coronación de la Virgen de los Ángeles de los Negritos

Los obispos son conscientes de que en Andalucía hay una gran devoción a las imágenes de la Virgen, por lo que ven lógico que las coronaciones sean frecuentes. En Sevilla, por ejemplo, monseñor Asenjo aseguró que le parecía bien que hubiera una al año. Tras la reciente de la Virgen de los Ángeles de la Hermandad de los Negritos, ya se ha anunciado para 2020 la de la Virgen de Escardiel de Castilblanco de los Arroyos.

Manzano recuerda que una coronación "supone un momento privilegiado en la vida de la diócesis", por ello, la solicitud debe estar lo suficientemente justificada. Se velará porque la devoción venga de antiguo y está extendida.

Las coronaciones canónicas han de ser austeras, con un completo programa formativo y una importante obra social previa

Las hermandades, por su parte, deberán cuidar la sobriedad y evitar gastos excesivos. Deben contar con una programación previa rica en formación y espiritualidad y, por último, han de ir acompañadas de una obra social vinculada a la diócesis que se pondrá en marcha con antelación.

Los delegados diocesanos responsables de las hermandades han acordado seguir manteniendo encuentros periódicos para aunar los criterios que regulan la vida de estas asociaciones públicas de fieles.