Patrimonio

La Casa de la Mujer arranca con un estudio técnico del antiguo colegio de San Bernardo

  • Urbanismo encarga un análisis del centro Paterri que recoja las obras necesarias para devolver al inmueble las condiciones mínimas para su reutilización para asociaciones y exposiciones

Una mujer pasa junto a la fachada del centro Paterri, en el número 40-42 de la calle San Bernardo.

Una mujer pasa junto a la fachada del centro Paterri, en el número 40-42 de la calle San Bernardo. / Juan Carlos Vázquez

Primer paso para convertir el antiguo colegio de San Bernardo en la Casa de la Mujer. La Gerencia de Urbanismo ha sacado a licitación una asistencia técnica para elaborar un estudio geotécnico, toma de muestras y ensayos para la caracterización de los materiales y los sistemas constructivos del inmueble conocido como centro Paterri.

Tras el estudio técnico, tocará el turno de que la Gerencia redacte el diseño para la rehabilitación de un edificio que se encuentra desocupado en los números 42 y 44 de la calle San Bernardo. El inmueble se sitúa sobre una plataforma elevada que está conformado mediante la adición de tres cuerpos paralelos, destinados los dos exteriores (con una sola planta) a albergar las aulas, mientras que el cuerpo central (con dos plantas de altura) se destina a los espacios de servicio y contiene dos patios que permiten la ventilación cruzada.

El estudio encargado por los técnicos de Urbanismo deberá aportar los datos que sirvan de base a la redacción del proyecto de ejecución que recoja las obras necesarias para devolver al inmueble las condiciones mínimas necesarias para su reutilización como Casa de la Mujer, un espacio de participación que contará con asociaciones y exposiciones.

La Gerencia estima que el coste de la rehabilitación es de 1,3 millones de euros

El proyecto que se redactará se centrará en un primer paso en la recuperación del continente, para lo que resulta necesario conocer mediante los oportunos análisis el estado concreto de los distintos elementos constitutivos de la estructura y de la envolvente. Los ensayos en el centro Paterri se centrarán en las condiciones actuales de los materiales que componen los distintos subsistemas constructivos, así como el reconocimiento del terreno.

“Como parte del estudio técnico sobre las condiciones de conservación y seguridad del edificio, se realizarán aquellos trabajos que permitan conocer las características de los materiales y el estado de conservación que presentan con el fin de proponer las actuaciones más idóneas”. El inmueble cuenta con un nivel de protección parcial grado 1 y una superficie construida de 1.012 metros cuadrados. El coste estimado de la rehabilitación es de 1,3 millones de euros.

En el pliego de la Gerencia se apunta que el objeto de los trabajos comprende el estudio de la información existente, la inspección y reconocimientos in situ, ensayos de resistencia a los materiales, así como el análisis de su estado, conclusiones derivadas de las inspecciones realizadas y propuestas de actuación. Los técnicos explican que “con este análisis se pretende una zonificación de los daños, a fin de establecer los riesgos más inmediatos, fijar las zonas más importantes de actuación y las medidas más adecuadas”.

En el estudio del estado actual del edificio se analizarán de las estructuras metálicas las deformaciones excesivas; los fallos en las cimentaciones; o las corrosiones de los elementos metálicos. De las estructuras de maderas la concentración de humedades, los daños de las cubiertas de los pabellones y los ataques de xilófagos. El estudio de las fábricas de ladrillo consistirá en la concentración de humedades; las deficiencias en la conservación de los materiales: eflorescencias; y las pérdidas de masas de ladrillos y morteros.

El trabajo deberá realizarse por un laboratorio acreditado por la Junta de Andalucía para el control de la calidad en la construcción y obra pública en las áreas de sondeos, tomas de muestras y ensayos in situ; y de ensayos de laboratorio de geotecnia y patologías estructurales. El estudio cuenta con un plazo máximo de ejecución de 45 días y un presupuesto de 18.755 euros (IVA incluido).

Hace más de cuatro años del desalojo del antiguo colegio público San Bernardo, que fue ocupado hasta el 2 de mayo de 2014 como “centro social ocupado y autogestionado”. Durante la operación, que estuvo marcada por un fuerte despliegue policial formado por unos 30 agentes, no estaban presente ningún miembro de los colectivos sociales que hicieron del edificio un espacio para “la acción político-social, la generación de alternativas contraculturales y de ocio desde la autogestión y la autonomía, el desarrollo colectivo, el aprendizaje y la crítica”.

Después de que los operarios lograsen romper las cerraduras, la entrada el inmueble se produjo sin incidente alguno. El Ayuntamiento recuperó el control de su titularidad tras una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). El primer edil Juan Ignacio Zoido anunciaba tras el desalojo que emprendería un “estudio técnico” sobre las condiciones de conservación “y seguridad” del edificio, para resolver su futuro uso.

El antiguo colegio San Bernardo aparece en la herramienta Horizonte Sevilla, que arrancó hace año y medio con el objetivo de rehabilitar un total de 30 espacios singulares de la ciudad, entre los que se encuentran Altadis, la Gavidia, San Hermenegildo o la Casa de Cernuda. Todos estos bienes patrimoniales suman una superficie de 125.000 metros cuadrados.

Mal estado de los ladrillos de la fachada del centro Paterri. Mal estado de los ladrillos de la fachada del centro Paterri.

Mal estado de los ladrillos de la fachada del centro Paterri. / Juan Carlos Vázquez

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