Fallece José Manuel Pumar, ex presidente de Inmobiliaria del Sur

El empresario José Manuel Pumar Mariño, presidente de honor de Inmobiliaria del Sur, ha fallecido a los 83 años de edad. Pumar Mariño tenía una dilatada trayectoria profesional que le hizo acreedor a varios premios y muestras de reconocimiento que también resaltaron sus valores personales. Entre ellos destaca el que recibió en el año 2008 por el Consejo Social de la Universidad de Sevilla y la Confederación Empresarial Sevillana, que recogió en un abarrotado paraninfo.

Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla, colegiado desde 1952 y presidente del consejo de administración de Inmobiliaria del Sur de 1982 a 2005, hay coincidencia en que Pumar Mariño gozaba de una trayectoria empresarial de excelencia. En sus orígenes como dirigente empresarial fue consejero delegado y presidente de Hytasa, un período en el que ostentó también la presidencia de la Asociación Nacional de Empresarios Desmotadores de Algodón, cuyos intereses defendió ante la Unión Europea. Era el hijo mayor de Prudencio Pumar Cuartero, fundador de Hytasa que falleció en Sevilla en 1981.

Fue uno de los primeros empresarios en crecer con éxito en el sector inmobiliario mediante la construcción de oficinas para su arrendamiento a terceros. Ha formado parte de distintos consejos de administración, tales como Hacienda La Cartuja, S. A., Eliosena, S.A. e Innovación en Desarrollos Urbanos del Sur, S. A., participada por Azvi y Adif, de las que fue vicepresidente. En su gestión al frente de Inmobiliaria del Sur destaca que en 1984, poco después de alcanzar la presidencia de la sociedad, que contaba con un capital social de 1,2 millones de euros, apostó por una salida a Bolsa con grandes resultados, una de las decisiones que más se le han valorado en cuantos homenajes a su persona y trayectoria ha recibido como muestras de su espíritu y de su visión de futuro.

En el año 2005 cedió la presidencia de la empresa a su hijo Ricardo, un abogado y economista que supone la tercera generación al frente de la compañía. Desde entonces asumió la presidencia de honor desde la que siguió siendo referente de la sociedad tras 23 años en el máximo puesto ejecutivo.

La patronal hispalense destacó en su momento la "magnífica reputación en todos los ámbitos de la ciudad" de Pumar Mariño como empresario, tildándolo de "ejemplo a seguir" y de ser poseedor de una cualidad clave en el emprendedor: "El empresario tiene que implicarse en el desarrollo de su ciudad y de la sociedad en general", glosó la CES con motivo del galardón a la excelencia que le concedió en 2008.

Inmobiliaria del Sur sigue manteniendo su carácter de empresa familiar gracias a la labor continuadora de Ricardo Pumar. Entre sus edificios más significativos destinados a arrendamientos se encuentran el Edificio Insur (Avenida Diego Martínez barrio), el Edificio Suecia (Parque Tecnológico de la Isla de la Cartuja), el Mirador de Santa Justa (Avenida de Kansas City) el Edificio Capitolio (Avenida de San Francisco Javier), el Edificio Nobel (Avenida Ramón y Cajal), el Edificio Menara (Avenida de la Buhaira) y el Edificio Buenos Aires (Avenida de la República Argentina).

Inmobiliaria del Sur, S. A. fue constituida en Sevilla el 6 de septiembre de 1945 con un capital social de 10 millones de pesetas. Sus principales fundadores fueron Prudencio Pumar, Luis Cobián y José Galnares. La compañía inició su actividad promotora y constructora en el barrio de Los Remedios, desarrollando la mayor parte de su actividad en la provincia de Sevilla hasta la década de los años noventa. En los años sesenta, tras la realización de diversas promociones de edificios para viviendas, se produjo un giro notable en la política de la sociedad, que comenzó a adquirir locales y oficinas para su alquiler. Fue este cambio el que motivó, precisamente, la construcción del ya referido Edificio Buenos Aires, en la Avenida de la República Argentina.

Una prueba de esa implicación de Pumar Mariño en el desarrollo de su cuidad fue la generosa donación que hizo del premio que le concedieron el Consejo Social de la Hispalense y la CES, que fue destinado a la cofinanciación del estudio sobre el impacto económico de las zonas de actuación logística del Puerto de Sevilla.

Su hijo Ricardo ha alabado siempre de su padre su "cultura de empresa", su "ética empresarial", así como su "honestidad, rectitud y sentido de la justicia" en la dirección de la compañía.