Justa Rufina prepara el menú más romántico para San Valentín

En el número 5 de la histórica Plaza de la Magdalena, en pleno corazón de Sevilla, Justa Rufina aguarda para ofrecer a sus comensales la mejor comida, el mejor servicio y, por supuesto, las mejores vistas.

Este restaurante, que ya abrió sus puertas el pasado junio de 2021, ha crecido rápidamente en éxito y fama, y se ha posicionado como uno de los locales más demandados de la ciudad. No es cuestión de suerte, sino que Justa Rufina ha conseguido crear la conjunción perfecta en atención, calidad y comodidad.

Próximamente se acerca la fecha marcada en todos los calendarios con un perfecto corazón rojo: San Valentín. Justa Rufina quiere acompañar a los enamorados de la ciudad en una de las veladas más mágicas del año, y lo hará de la mano de un menú degustación del chef Manuel Berganza y un cocktail creación del italiano Luca Anastasio.

Cocktail Bombe d’amour

El menú especial San Valentín comenzaría con un cocktail original inspirado en todo el romanticismo francés: el Bombe d’amour. Luca Anastasio, su creador, es un trotamundos que quedó prendado del mágico romanticismo que desprendía Francia y que quiso trasladar todo ello a una bebida. Así, a partir de Ron Zacapa, licor de frambuesas y grosellas, champagne rosado francés, bitter amargo, pétalos de rosa comestible y un toque de Peta Zeta, este creador innato ha elaborado una bebida con la que no hacen falta las palabras. “El cocktail dice ‘te quiero’ sin necesidad de pronunciarlo”, explica Anastasio.

Este cocktail de tono rosado servido en copa Pompadour, que asemeja el seno de la icónica María Antonieta, se acompaña de un entrante hecho a base de foie y Peta Zetas. Un bocado sencillo y delicado para ir abriendo el estómago.

Menú especial de San Valentín

A continuación, se procedería a tomar el menú del chef Manuel Barganza. Esta degustación constaría de diversos platos para el centro de la mesa entre los que se encuentran una tosta de pastrami casero, relish de pepinillo encurtido y nube de comte; un aguacate asado con salpicón trufado; y calabaza con queso de cabra, aceite de salvia y chistorra crujiente.

Además de estos entrantes, los comensales podrán elegir entre dos platos principales. Por un lado, lomo de bacalao asado, tomate semiseco y crema de ajo asado o, por otro lado, carrillada de ternera lacada, puré de patata ahumado, enoki y ensalada de pepino. El toque final lo pone una tarta de queso payoyo, fresas y sorbete de cava.

Disfruta de las mejores vistas de la ciudad

Además del elaborado menú y del espléndido servicio de Justa Rufina, los comensales no deberían prescindir del placer de acceder a la azotea y tomar allí la última (o penúltima) copa. Desde lo más alto del edificio se aprecian tanto la tradicional Giralda como la innovadora Torre Sevilla, ambas bañadas por el sol de media tarde en su ocaso.