En toda la Unión Europea, incluso en los países teóricamente más avanzados en políticas de igualdad, las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de acabar trabajando a tiempo parcial o de sufrir interrupciones en su carrera profesional para hacerse cargo del cuidado de los hijos o de otras responsabilidades familiares.

Así se expone en la jornada de Igualdad de género y conciliación familiar y laboral que la Oficina del Parlamento Europeo en España ha puesto en marcha para este 14 de septiembre, en la que se muestran datos que avalan la anterior afirmación, como que en 2016 fue un 26,6% de las madres empleadas las que trabajaban a tiempo parcial, frente a un 5,1% de los padres. 

Este fenómeno contribuye a la brecha salarial y a las pensiones. Tanto es así que, en 2016, los datos españoles en materia de salario situaba una brecha del 14,2% (16,2% en la Unión Europea). En el caso de las pensiones, Eurostat registró una diferencia del 36,1% en nuestro país (40,2% en la UE). 

Además, según los datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de empleo femenino en 2017 fue de un 43,11%  frente a un 54,60% para los hombres. 

Medidas por la conciliación laboral

Desde el Parlamento Europeo se está estableciendo la posibilidad del derecho a una baja de paternidad de al menos 10 días para aquellos padres o personas que ejerzan su papel en el cuidado de un bebé.

Además de este posible éxito social, se estima la vigencia del derecho individual a 4 meses de baja de paternidad o transferible hasta que el niño cumpla los 10 años, así como la baja remunerada para trabajadores que cuidan a familiares enfermos o dependientes. 

Para ello, los eurodiputados proponen cubrir un mínimo del 78% del salario bruto en los casos previamente expuestos. Asimismo, la eurocámara apuesta por garantizar un 80% del salario bruto durante los 10 primeros días de baja de paternidad para el padre.