La Gerencia de Urbanismo ha concedido una licencia de obras de demolición para un salón de celebraciones con capacidad para 400 personas situado en el cortijo Huerta de las Palmeras, en el número 10 de la carretera de Su Eminencia. Aunque aún no ha llegado a la Isla de la Cartuja un documento, la intención de los nuevos propietarios del inmueble es levantar una residencia de mayores.

La familia Gamero-Cívico de la Lastra, propietaria del establecimiento, traspasó el polémico edificio a inversores de Madrid, una venta que tuvo lugar el pasado 4 de octubre en una notaría de la capital española. La nueva propiedad tiene intención de convertir el inmueble en una residencia de ancianos. Para este fin se ha constituido la empresa Centro de Mayores La Palmera S.L., cuyo objeto es la promoción y adquisición de centros residenciales para la tercera edad, para su gestión, administración y su cesión en arrendamiento, según figura en el Registro Mercantil.

Esto acaba con una batalla de cuatro largos años de los vecinos de Palmera Parque contra un salón de celebraciones con música al aire libre autorizado por el Ayuntamiento. Tras una dura batalla judicial, el juez sentenció que había “indicios suficientes de nulidad” en el trámite por el que el gobierno local autorizó esta obra. La sentencia que dio la razón a los vecinos se emitió el 6 de marzo de 2019 y fue la puntilla para los propietarios.