El fuego que el pasado domingo afectó a una habitación del Hospital Macarena se originó en un colchón de una cama de hospitalización ubicada en la octava planta, que corresponde al área de Medicina Interna.

Las llamas, que provocaron humo intenso, no llegaron a afectar al resto del mobiliario gracias a la rápida reacción del familiar de un paciente ingresado; y a una primera actuación de profesionales de mantenimiento del centro.

La Policía Local ha puesto a disposición judicial al presunto autor del fuego

Según explican fuentes hospitalarias, los hechos ocurrieron la tarde del domingo, en torno a las ocho y media, cuando el colchón comenzó a arder. El fuego se originó en una habitación que hace años era triple y que ahora se distribuye en dos habitáculos, con dos camas, separados de una mampara de aluminio.

La gomaespuma del colchón afectada.

El colchón afectado se ubica en la cama ubicada al fondo, junto a una ventana. Como puede comprobarse en la foto, que fue tomada poco después de los hechos, parte de la gomaespuma del colchón quedó afectada.

Los colchones en los centros hospitalarios está protegidos por una funda fabricada con materiales para impedir la propagación de posibles llamas, de modo que trabajadores del centro sospechan que posiblemente el fuego se originó de manera premeditada.

Un familiar de un paciente que se encontraba ingresado en la otra cama, al advertir el fuego, salió al pasillo a buscar un extintor que utilizó para sofocar las llamas. A continuación actuaron dos profesionales de mantenimiento del centro hospitalario que entraron en el habitáculo, desmontaron las ventanas ; y colocaron varios ventiladores para tratar de lograr que el humo saliera del hospital a través de las ventanas.

Las ventanas que desmontaron dos profesionales para impedir que el humo se propagara.

El humo que provoca la gomaespuma al arder es intenso y puede resultar tóxico, de modo que puede afectar a pacientes con el sistema inmunitario debilitado. El objetivo de los trabajadores, según explican las mismas fuentes, era evitar que el humo se colara por los conductos de ventilación a otras habitaciones.

Trabajadores de seguridad del centro acudieron también al lugar del conato de incendio cuando saltaron las alarmas, confirman fuentes oficiales del centro, al precisar que este equipo de intervención del hospital es el responsable de actuar ante estas situaciones, y de acceder a los equipos específicos para la autoprotección. 

Hasta el lugar llegaron equipos de Bomberos y agentes policiales. “Los efectivos de emergencias dieron la enhorabuena a los trabajadores por su rápida actuación, pero advirtieron que sin equipos de extinción habían expuesto sus propias vidas al entrar en la habitación sin conocer la situación”, añaden las mismas fuentes del centro.

Tras los primeros minutos, y con el testimonio de algunos testigos, el caso ha sido puesto a disposición judicial ante los indicios de que el fuego, que quedó en conato, pudiera haber sido provocado por una persona con posibles trastornos. De hecho, "Policía Local ha puesto a disposición judicial al presunto autor de estos hechos", precisan fuentes municipales. 

"El plan de autoprotección del hospital se activó y el conato fue sofocado sin daños personales y escasos daños materiales. Cabe resaltar que el primer equipo de intervención, del propio hospital, fue decisivo para neutralizar el referido conato. De hecho, Bomberos los felicitó por su diligencia y rapidez", añaden fuentes del Ayuntamiento de Sevilla.