"El logro de la fusión es que el paciente reciba lo mejor desde cualquier hospital"

Javier Márquez, jefe de Neurocirugía en el Macarena y el Rocío

El responsable de Neurocirugía en Sevilla, la primera especialidad que se ha unificado, explica el proyecto que se inició en 2008 Según él, la reordenación no supone recortes.

El doctor Javier Márquez, neurocirujano jefe del Virgen del Rocío y del Virgen Macarena.
El doctor Javier Márquez, neurocirujano jefe del Virgen del Rocío y del Virgen Macarena.
Noelia Márquez

17 de junio 2013 - 05:03

-La fusión de los Hospitales Virgen del Rocío y Virgen Macarena ha generado gran polémica en el ámbito sanitario y se ha traducido en protestas del personal del SAS en la calle. La especialidad que dirige, Neurocirugía, ha sido la primera en esta reordenación hospitalaria. ¿Puede explicar estos cambios?

-El proyecto se inició en 2008 dentro de un plan estratégico de la Consejería de Salud que nada tiene que ver con la crisis ni con los recortes. Se trata de reorganizar los servicios de los dos hospitales para optimizar los resultados y modernizarlos. Es un plan estratégico de un servicio que atiende a la población de la provincia de Sevilla y de Huelva. Se trata de un modelo cuyo objetivo es mejorar la asistencia utilizando los mismos medios existentes.

-De este proyecto, ¿qué le hace sentir más orgulloso?

-El hecho de que un enfermo que pertenezca al Hospital de Osuna, o al Hospital de Valme o al Hospital Virgen del Rocío o al Macarena reciba el mejor tratamiento siempre. Para ello hay que optimizar. Por ejemplo, un TAC intraoperatorio supone 500.000 euros, un microscopio para operar en la cabeza, 300.000. Para que un quirófano sea el mejor para una operación de Neurocirugía necesita una inversión de dos millones. Lo mismo ocurre para las intervenciones de columna. Todos queremos que nos operen los mejores independientemente del hospital. Ésa es la meta.

-Sindicatos y asociaciones de pacientes temen que tras esta reordenación se escondan más recortes en Sanidad. ¿Los hay?

-No. Trabajamos con los mismos presupuestos y el mismo personal. Desde la Consejería de Salud no nos han ordenado recortes. Es la situación actual, aún no sabemos cómo será el futuro; si empeorará o habrá menos dinero para funcionar como hasta ahora. Pero no es el caso actual.

-¿En qué se ha plasmado la unificación de Neurocirugía en la ciudad?

-Antes de la fusión este servicio de Neurocirugía en el Hospital Macarena era una sección, es decir un equipo que no tenía autonomía, que dependía de Cirugía General. Ahora esta sección depende del equipo Neurocirugía del Virgen del Rocío.

-¿Qué beneficios tiene?

-Cuando se construyó el Hospital de Traumatología del Hospital Virgen del Rocío se creó un servicio de Neurocirugía gigantesco. Fue una decisión que se adoptó en los años 70 siguiendo la filosofía de hospitales americanos que consiste en crear sólo un gran hospital dedicado a la traumatología, a las intervenciones cerebrales y a los politraumatismos. Desde entonces en Sevilla se identifica la Neurocirugía muy especialmente con el Hospital de Traumatología. Es un asunto histórico. Desde entonces cada año se realiza en torno a 1.800 intervenciones de Trauma y otras 2.000 en el Infantil. El servicio del Macarena responde a un sistema clásico. El año pasado registró su mayor volumen de intervenciones de este tipo, unas 300.

-¿En qué se traduce?

-En Neurocirugía la experiencia del especialista en el quirófano es fundamental.

-Ahora, todas las intervenciones a nivel craneal se realizan en el Virgen del Rocío y las operaciones de columna, en el Macarena.

-En este ámbito cuanto más especialización mejor para los pacientes. Que cada equipo se dedique a un tipo de problemas permite mejorar en gran medida la asistencia y, además, reduce costes. Los traslados de los especialistas entre los dos hospitales y la asignación son voluntarios.

-Otro de los temores expresados en múltiples ocasiones por pacientes y sindicatos es la asistencia de traumas que lleguen hasta el Macarena y que requieran una intervención a nivel cerebral.

-Los equipos del 061 conducen a los enfermos al centro que en ese momento necesita el paciente en función del problema que presente. Por ejemplo, en un accidente de tráfico, el hospital se traslada al enfermo a través del 061. La reanimación y la primera valoración médica la recibe en la ambulnacia. Todas las urgencias que requieren una intervención quirúrgica en el cerebro son trasladadas al Hospital Virgen del Rocío, donde está el equipo preparado para estas operaciones.

-Otra de las denuncias sobre los temidos recortes se refiere a la ausencia de especialistas a partir de las ocho de la tarde. ¿Qué ocurre con un enfermo que sufra un ictus a partir de esta hora o con una persona que tenga un trauma grave en un accidente?

-Cuando un enfermo que sufre un ictus y tras una prueba de imagen (TAC o resonancia) en el Hospital Macarena se comprueba que requiere de una intervención quirúrgica en el cerebro, este paciente se traslada al Virgen del Rocío. Es lo mismo que ocurre cuando un enfermo que sufre un ictus en el Hospital de Osuna, en Bormujos o en el Valme. Del servicio de Neurocirgía Virgen del Rocío dependen nueve hospitales, y ahora se incorpora también el Macarena para las intervenciones a nivel cerebral. En el Hospital de Traumatología hay dos quirórfanos preparados siempre para las Urgencias y el enfermo puede someterse a la intervención con mucha más rapidez que en otro hospital donde no existe esta disponibilidad. Es inviable que todos los hospitales tengan los mejores equipos para todo. La especialización de los centros es el futuro y así se organizan por ejemplo los hospitales más prestigiosos de EEUU, por ejemplo.

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