El próximo día 19 de junio comenzarán los trabajos en uno de los tres aceleradores lineales instalados en el Hospital Macarena. Durante tres semanas este equipo tecnológico será sometido a una renovación del hardware y del software. Otra de las incorporaciones previstas este año, mediante la donación de la Fundación Amancio Ortega, será un TAC específico para la planificación de tratamientos de radioterapia. Esta nueva tecnología aporta dos grandes beneficios: por un lado, permite mayor definición de imagen para identificar las lesiones tumorales en tejidos blandos; y por otro lado, permite terapias dinámicas, ya que el brazo giratorio de la máquina (acelerador) tiene la posibilidad de irradiar en movimiento.

Cuando termine el proceso de renovación el Macarena estará dotado con tres aceleradores nuevos en el plazo de dos años. "Otro de los dispositivos adicionales que se va a incorporar es el Gating, un mecanismo que permite regular la irradiación al ritmo del movimiento del órgano", explica el doctor Arrans. Por ejemplo, cuando los especialistas tienen que irradiar el pulmón, ante los movimientos de inspiración e expiración, el sistema Gating resulta de gran utilidad para evitar irradiar en zonas sanas. En el caso del pulmón, por ejemplo, la máquina se para y deja de irradiar cuando se produce un movimiento (inspiración o expiración) que cambie la localización del tumor programada para la irradiación. "También contaremos con una sonda ultrasónica para comprobar la localización de los tumores de próstata", añade Arrans. En el transcurso de 2018 y 2019, el hospital también dispondrá de SBRT (Radioterapia Estereotáctica ), que permite altas dosis en pocas sesiones. Otro de los avances esperados permitirá la implantación de Radiocirugía para la eliminación de tumores cerebrales. Esta técnica sólo se aplica, de momento, en Granada y Málaga, en el ámbito andaluz. "Estas aplicaciones adicionales situarán al Hospital Macarena entre los centros europeos de primer nivel en lo referido a recursos tecnológicos", concluye.