Marko Dmitrovic, hasta ahora único refuerzo del Sevilla 2021-22, aúna todas las ventajas considerables a  priori para rendir y competir por un puesto en la portería desde el minuto 1. La primera es que, al ser el primer refuerzo, por llegar como agente libre, conoce a su nuevo cuerpo técnico y su nuevo hábitat humano desde el principio. "Poco a poco me voy familiarizando con el ambiente, con la forma de entrenar y muy pronto todo encajará", asegura. Pero hay otras que él mismo destacó en una entrevista a la Federación de Fútbol de Serbia.

La primera tiene nombre y apellidos y comparte nacionalidad. Este domingo se unió ya Nemanja Gudelj a la concentración en Alicante, ya que sí disputó partidos con Serbia tras la Liga, a diferencia del también internacional Dmitrovic. "También supondrá un buen apoyo Nemanja Gudelj. Hablamos por teléfono, me dio la bienvenida y me explicó cómo funciona todo y qué tengo que hacer para encajar lo más rápido posible. Él tuvo un descanso extra y se unirá ahora con nosotros", asegura el guardameta.

A sus 29 años, Dmitrovic está en la edad ideal para competir con Bono, que además jugará la Copa Africana de Naciones, por la portería. Además, lleva en España desde 2015, con el Alcorcón, y en el Eibar, donde conoció a Joan Jordán y Bryan Gil, desde 2017. "También tengo la ventaja de que conozco muy bien a la mayoría de mis nuevos compañeros porque llevo mucho tiempo jugando en España. Incluido el período que pasé en Alcorcón, llevo aquí seis temporadas y no debería haber problemas de adaptación. No veo la hora de jugar los primeros partidos", dice el serbio, deseoso de debutar como sevillista. 

Y es que ya nota esa competitividad y esa búsqueda de altos objetivos. "En los primeros entrenamientos la sensación es fenomenal. A cada paso se nota que el Sevilla es un gran club, con una organización perfecta y una gran afición", afirma. 

Avanzar en la Champions, dar otro saltito en la Liga, luchar por la Copa del Rey... "Ésa es exactamente la razón por la que insistí en quedarme en España. Tengo grandes ambiciones y mi deseo es competir con el Sevilla en todos los frentes por la clasificación más alta. No podría haber elegido un mejor entorno para continuar mi carrera. Tendremos una preparación muy dura y exigente antes de los primeros partidos en la Liga y en la Champions", asevera el portero.

Dmitrovic, a diferencia de Gudelj, se incorporó desde el primer día porque no jugó los dos amistosos de junio con Serbia. Pero sigue contando para el seleccionador balcánico. "Vi los dos amistosos contra Jamaica y Japón por televisión. Es bueno que Stojkovic pueda contar con más candidatos, porque Serbia no está formada solamente por 20 ó 25 jugadores. Ya miro a septiembre con los duelos contra Luxemburgo y la República de Irlanda", dijo sobre los partidos de clasificación para el Mundial de septiembre, para los que seguramente será citado. "Vamos paso a paso; es importante continuar la racha ganadora y llegar al último partido en Portugal el 14 de noviembre con una posibilidad real de clasificarnos al Mundial".

Por último, también tuvo palabras cariñosas para el descendido Eibar: "Me gustaría también agradecer a todos en Éibar; pasé cuatro hermosos años allí y maduré plenamente tanto en lo profesional como en lo personal. Lamento que termináramos la temporada en el último lugar, pero el club está funcionando bien y creo que volverá a Primera muy pronto", dijo el flamante portero del Sevilla.