Interesante tercera masterclass de Monchi, que abundó en un asunto ya muy técnico sobre la base de su trabajo: seguir y fichar a futbolistas. El director deportivo llamó a este tercer capítulo Historia de un fichaje: El seguimiento en bruto.

Monchi explicó que hay "cinco fases de la planificación (del fichaje de un futbolista) que se van repitiendo año tras año: seguimiento, definición de elegidos, establecimiento de perfiles, negociación y adaptación". Y se centró en el seguimiento en bruto, "de julio a diciembre, previo al seguimiento en neto, que va de enero a mayo".

"En el seguimiento en bruto vemos fútbol sin un objetivo concreto. No vamos a ver al lateral del St. Etienne, al portero del Young Boys, al central del Austria de Viena o al delantero del Borussia Dortmund. No, vamos a ver fútbol en general para ir engordando nuestra base de datos, que es nuestro tesoro, nuestra piedra filosofal".

El seguimiento en bruto se divide en tres: "Primero, el visionado del máximo número de partidos posible sin un objetivo concreto; segundo, realización de onces ideales de cada mes; tercero, selección de jugadores de cada campeonato por cada posición".

El gestor sevillista explicó cómo distribuye entre sus doce hombres de scouting los diferentes torneos a seguir. "Cada scout tendrá bajo su control tres o cuatro campeonatos, entre ellos, uno de las ligas de clase A: Alemania, Francia, Italia, Inglaterra, Bélgica, Holanda, Portugal, Argentina y Brasil. Las ligas de clase B son de un nivel algo inferior, pero también de un necesario seguimiento: Austria, Polonia, Suiza, Croacia… Chile, Colombia, Perú, México y la MLS (EEUU)".

En la clase C incluye torneos como la Copa de África, la Commebol, la Copa de Asia... "Cada scout hace al mes un once ideal de cada campeonato". Luego, "en diciembre, con todos estos datos, con esos onces ideales, hacemos un primer filtro: de 500 ó 550 jugadores".

E incidió en que los futbolistas han sido vistos en directo y en vídeo: "Hemos visualizado el fútbol en dos formatos: en vivo y a través del vídeo, de plataformas digitales. Siempre digo que nunca firmaré un jugador por haberlo sólo en vídeo, pero nunca firmaré un jugador que no haya visto en vídeo. El vídeo es fundamental. Es imposible poder viajar para ver en vivo todos los partidos".

Pero ahí no queda el seguimiento bruto: "Luego hay que ir al futbolista, porque hay muchos aspectos, componentes tácticos o psicológicos, que en el vídeo no se ve". Aun así, le dio una importancia clave al vídeo, porque es imposible realizar una base de datos de 550 futbolistas viéndolos a todos en directo. "Nunca firmaré un jugador por haberlo visto sólo en vídeo y nunca firmaré un jugador que no haya visto en vídeo", dijo rotundo.