Más de 200 trabajadores han quedado enterrados bajo avalanchas de lodo en los últimos tres días mientras reparaban carreteras de las áreas afectadas por el terremoto del pasado lunes en la provincia suroccidental de Sichuan.

Según informa la agencia oficial Xinhua, los sepultados trabajaban en la reparación de las vías de comunicación, según dijo un funcionario del Ministerio de Transportes chino.

Dos excavadoras y otros seis vehículos también se perdieron a causa de los corrimientos de tierra, causados por fuertes réplicas del terremoto. En la tarde de este lunes, una réplica de 5,0 grados en la escala de Richter sacudió el condado de Qingchuan, en la misma provincia.

Mientras, las tropas militares y policiales y los equipos de socorro aún no han podido acceder a 77 aldeas aisladas, debido a los problemas de comunicación y transporte, indicó el jefe del Partido Comunista de la provincia de Sichuan, Liu Qibao.

El Ministerio de Exteriores informó hoy que Pekín ha autorizado a la Cruz Roja China a invitar a algunos equipos médicos extranjeros para que trabajen en las zonas devastadas por el terremoto de 8,0 grados en la escala de Richter, que causó al menos 34.000 muertos, más de 200.000 heridos y decenas de miles de desaparecidos. Además, unos cinco millones de personas se han quedado sin techo.

El portavoz del Ministerio del Exterior, Qin Gang, dijo que China agradece las ofertas de ayuda por parte de gobiernos extranjeros y sociedades de la Cruz Roja y que mantendrá los contactos con ellos respecto a las labores de rescate y de ayuda humanitaria.