Las fuertes lluvias causan la crecida súbita de los ríos vascos y ponen en jaque a Bilbao

La alerta ante la posibilidad de desbordamiento del Nervión quedó desactivada por la tarde

Dos jóvenes observan la crecida del cauce del Nervión a su paso por Bilbao.
Dos jóvenes observan la crecida del cauce del Nervión a su paso por Bilbao.
Efe / Madrid

28 de enero 2009 - 05:01

Cuando todavía se evalúan los daños causados por el temporal de viento del pasado fin de semana, un nuevo frente de lluvia provocó ayer una crecida súbita de los ríos del País Vasco, en especial del Nervión, que incluso obligó a desalojar parte del Casco Viejo de Bilbao. La situación en el País Vasco fue tal que, ante el peligro de desbordamiento de los ríos, el Gobierno de la comunidad activó el Plan Especial de Emergencias contra Inundaciones, que quedó desactivado a media tarde.

La lluvia cayó fuerte durante toda la mañana y puso en jaque tanto a las autoridades vascas como a los vecinos de las localidades por las que discurre el río Nervión. Más de una treintena de colegios de Vizcaya y Álava fueron desalojados como medida preventiva ante el riesgo de inundación.

En Bilbao, la ciudad que se ha llevado la peor parte, la crecida del Nervión obligó al ayuntamiento a activar la "máxima alerta" y ordenar el desalojo de varios centros y establecimientos del casco viejo. En San Sebastián, la crecida del Urumea hizo que el consistorio activase el plan de prealarma. En Navarra se activó el nivel de preemergencia por inundaciones después de que la crecida de varios ríos de la comunidad foral obligase a cortar algunas carreteras por presenciad de balsas de agua.

La situación vivida ayer en el País Vasco, Aragón, Navarra y Cantabria, ha hecho que la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega ofrezca ayuda a estas cuatro comunidades.

Mientras, las comarcas más afectadas este fin de semana por el temporal de viento que, directa o indirectamente, ha costado la vida a una quincena de personas, la mayoría en Cataluña, donde Protección Civil mantiene la alerta por fuertes vientos, siguen haciendo balance de los daños.

Las abundantes lluvias de la última semana han provocado un aumento de la reserva de agua almacenada en los embalses peninsulares, que se encuentran al 50,9% de su capacidad, 2,6 puntos más que hace siete días.

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