La serie más arriesgada de Antena 3 para los próximos meses es Matadero, un "thriller ibérico" con tintes de comedia negra y aire cañí ambientado en un pequeño pueblo donde nunca pasa nada, pero donde unos acontecimientos inesperados ponen patas arriba la vida de los vecinos, que actúan como nunca hubieran imaginado. La directora de Ficción de Atresmedia, Sonia Martínez; el director de la serie, Jordi Frades, y su guionista, Daniel Martín, han presentado esta ficción de diez episodios con final cerrado en el FesTVal de Vitoria.

Los directivos han explicado que el germen de Matadero surgió durante el rodaje de La catedral del mar, ambas coproducidas por Atresmedia y Diagonal TV, y que en el contexto de una serie solemne como esa, se propusieron crear una nueva ficción más alocada: una trama de suspense en la que el entorno fuese un personaje más al estilo de la estadounidense Fargo o Twin Peaks. "Pero no queríamos un thriller a la americana, sino algo que fuera muy nuestro, muy español, es un viaje fantástico plagado de homenajes, desde García Berlanga y Alex de la Iglesia pasando por Fernando Esteso hasta Julio Iglesias", explica Frade.

"Es un homenaje respetuoso desde lo lúdico a la historia de la televisión en España", añade el director de la sreie. Martín por su parte subraya que esta ficción "no tiene mayor pretensión que la de hacer pasar un buen rato". El guionista detalla que trabajó con varias premisas: que se reflejara la idiosincrasia española y que todo fuera divertido, impactante y original. El resultado es una serie arriesgada.

Matadero se ha grabado en localizaciones reales de Castilla y León y Madrid que ambientan el pueblo ficticio de Torrecillas, donde se ubica el matadero de Francisco (Antonio Garrido), un empresario que importa cerdos de baja calidad y aprovecha el interior de algunos de ellos para transportar droga. Con él trabaja su cuñado Alfonso (Pepe Viyuela), un veterinario harto de certificar animales en malas condiciones, pero que calla porque Francisco conoce un secreto de su pasado que arruinaría su matrimonio con María José (Carmen Ruiz). Una serie de circunstancias inesperadas trastocarán la vida estos personajes y otros vecinos del pueblo y los hará actuar de una manera impensable.

"La serie se va acelerando. Empieza muy loca pero va a más", adelanta Viyuela, que protagonizó la peculiar serie policíaca Olmos y Robles tras acabar Aída. Alfonso durante toda la serie intenta "volver a la casilla de partida, recuperar su vida, pero las circunstancias lo llevan. Es un tipo que quiere sobrevivir y al verse acorralado saca lo peor de sí", resume el veterano actor, que lleva más de 30 años en el primer plano televisivo.

Ese punto de no retorno marca el destino de todo el universo de Torrecillas, que se ve afectado por la cadena de acontecimientos que sacude la apacible vida del pueblo. María José es una de las personas arrastrada por esta vorágine. "Al principio parece que no le pasa nada, pero a partir del quinto capítulo le ocurren cosas muy fuerte", asegura Carmen Ruiz.

Esta propuesta de Antena 3 es uno de los contenidos más arriesgados de la parrilla en abierto en la nueva temporada.