Suena la melodía de Arrayán a la vez que el tintineo de los platos de la cena. Es el rito de cada noche para cerca de un millón de andaluces. Es una audiencia familiar, que va desde los 25 a más de 64 años. Al cabo de ocho temporadas el serial de Canal Sur, producido por Linze (de la multinacional Endemol), no es sólo un hábito para viejos. De la audiencia media que suele tener este espacio de domingo a jueves es de unos 280.000 pensionistas y algo más de 200.000 en las otras franjas adultas (de 25 a 44 años y de 45 a 64), aunque la fidelidad de los ancianos es espectacular: más del 80 por ciento visiona en su totalidad cada capítulo. Arrayán, con 712.000 espectadores de media en esta temporada (con picos de cerca de 900.000), es lo más visto en la comunidad andaluza en la mayoría de las jornadas en que se programa. La mayoría femenina arrastra también a espectadores masculinos que, si no hay fútbol, se inclinan por lo que sucede en el hotel andaluz.

Andalucía sostiene a su vez la emisión de las telenovelas a nivel nacional con 2 millones de espectadores que van y vienen. Los andaluces más fieles al plasma se han hecho adictos a las historias interminables. A las diarias y a las semanales, como Dos de mayo o Ponme una nube, Rocío. La deserción de seguidores andaluces de Yo soy Bea tras el cambio de protagonista ha sido crucial para los índices de Telecinco en Andalucía, que en octubre ha sido la tercera cadena más vista, pese a ser líder sobrado hace un año.

Los fieles a las telenovelas son los que refuerzan cada día los datos de Canal Sur con los dos seriales que apuntalan la columna vertebral de su parrilla. Además de Arrayán el otro éxito de la cadena es el culebrón venezolano Ángel rebelde, sucesor de las tramas de Gata salvaje. Este serial, líder si no está Arrayán, está cuestionado (incluido el Consejo Audiovisual) por sus contenidos sexistas y su aliento a la violencia, ya que en bastantes escenas aparecen semidesnudos, discusiones y parejas que llegan a las manos, que infringen el horario protegido. Canal Sur escurre el bulto sobre este contenido que le aporta mensualmente más de punto y medio a la cadena: sin la inadecuada Ángel rebelde, Canal Sur, con un 17 de cuota, empataría con Antena 3, segunda con 16,5 y se quedaría a 2 décimas por encima de Telecinco, 16,3. Las intrigas llegadas de Venezuela son líderes en la sobremesa andaluza, con unos 680.000 espectadores de media, lo que supone 1 punto seguro al share diario. La RTVA va a resistirse para dar de baja una telenovela que le reporta tanto y que además le cuesta menos de 7.000 euros el capítulo. Ganga rentable.

El éxito de Canal Sur limita los datos del líder nacional en la franja, Amar en tiempos revueltos, de La 1. Cada tarde conectan con esta ficción ambientada en la posguerra cerca de medio millón de andaluces, con una audiencia familiar. Pero mientras el culebrón de Canal Sur tiene entre sus seguidores una mayoría de la clase media-baja y clase baja, el de TVE lo sostiene el público de clase media.

Ángel rebelde pone en cuestión la labor de servicio público de la RTVA. También el programa que le sucede en la parrilla, La tarde con María. El magacín de ZZJ es ahora el líder de las tardes desde que incorporó humoristas, y rastrea en abundancia chistes y actuaciones cómicas a lo largo de los 20 años de historia de Canal Sur. Eso sí, estas secciones humorísticas han atraído al público adolescente, que no se prodiga por el canal generalista (son más habituales en Canal Sur 2). Los jóvenes son los que han llevado al actual éxito a María del Monte.

Se llama copla, flamante Ondas, está a la espera de contar con los adolescentes que le llevaron a las cotas máximas de la cadena esta pasada primavera. El regreso del musical ha ido sumando seguidores y ya ha superado los 800.000 espectadores en la noche de menos consumo de la semana. Un logro. Si vuelven a contar con los jóvenes, los cantantes de Eva González podría volver a sumar más de millón y medio de seguidores, cifras estratosféricas sólo al alcance de las finales futbolísticas.