Cosas que hacer en Arcos de la Frontera en un sábado por la tarde

CORRIDA DE TOROS EN ARCOS Ganadería: Seis toros de El Torero, correctos para esta plaza, de muy buen juego en líneas generales y nobles aunque algunos a menos o rajados en el último tercio. Para el cuarto, premiado con la vuelta al ruedo, se pidió el indulto. El segundo, más complicado por el pitón izquierdo. El tercero se lastimó. TOREROS: Sánchez Vara de rosa y oro, trasera tendida DOS OREJAS y pinchazo y estocada DOS OREJAS Y RABO tras aviso El Arqueño de obispo y azabache, casi entera y descabello OREJA y estocada sin muleta DOS OREJAS Y RABO José Arcila de nazareno y oro, montera en mano, que debutaba en ruedos europeos, casi entera OREJA y estocada dos OREJA tras aviso. La terna salió a hombros INCIDENCIAS: Casi lleno. Destacó en la brega y en banderillas Caco Ramos y excelente salto de la garrocha del tercero de Sánchez Vara Raúl Ramírez 'Peque'.

Entre el elenco de cosas que se pueden hacer en Arcos, una de ellas vuelve a ser ver una buena tarde de toros, a la sombra de la peña y al abrigo del levante.

Mala cosa será que no se den toros, por lo menos en feria: tienen un torero local como Manuel Barea, tienen un público que llenó la plaza y eso que no era fecha buena, que se lo pasó de lo lindo.

En la tarde de ayer en Arcos pasaron muchas cosas, la corrida se movió con interés y nobleza y los toreros se entregaron haciendo de todo, tirando de repertorio para salir a hombros. Hasta casi se indulta un toro, cosa que no se podía hacer porque para este tipo de plaza no se admite y porque el toro era rajadito, eso sí, se le premió con un arrastre lento y para los ganaderos de El Torero ayer fue una buena tarde sin duda.

Sánchez vara muy profesional con su buen primero, toro que acusó la pelea en varas para terminar rajándose pero al que el experimentado torero de Guadalajara le sacó todo lo que llevaba dentro con oficio. Mejor todavía con su segundo, arrastrando la muleta al natural tras emotivo inicio de rodillas. Pareó ambos toros Sánchez Vara y el segundo al hilo de un gran salto de la garrocha de su banderillero El Peque, hasta quiso cerrar el tercio banderilleando en la silla.

El Arqueño resultó cogido por su primero, el más complicado del envío, que se había colado ya por el izquierdo un par de veces y hasta en banderillas. Acusó Barea un fuerte dolor de un golpe al final de la columna y se le notó en la plaza pero sacó casta y valor para bajar mucho la mano a su primero en una faena que planteó por la derecha y para tirarse a matar a su segundo sin muleta, con una simple y bonita rosa, dejando una gran estocada.

Y José Arcila, torero clásico, en otra onda, dejó muestra de su estilo en su buen lote y que quiso pelear con más calor ante su segundo, toreando de rodillas. Su primero se lastimó pero aún así se tragó muchos pases de las maneras elegantes del colombiano. Lo dicho, ¡A los toros en Arcos!