Pequeños ferroviarios

Si hay un juguete capaz de resistir el paso del tiempo y las modas es el de los trenes. Por eso las maquetas de trenes en miniatura que cada año están en Navidad en la estación de Santa Justa desde el año 1997 es una visita obligada para hacer en estas fechas con los niños. Hasta el 4 de enero de 2017 se podrá visitar por las tardes la exposición El ferrocarril a través del tiempo. Realizada por la Asociación Sevillana de Amigos del Ferrocarril, la maqueta recrea piezas, muchas realizadas de forma artesanal, del ferrocarril español y diferentes tipos de paisajes.

Un mundo a escala en el que las vías mandan y donde destaca la reproducción de la estación de Santa Justa o el puesto de mando inspirado en La Única, la caseta de cambio de agujas actual sede de Radiópolis, en Torneo. El precio de la entrada, 1 euro, se destina al mantenimiento y mejora de de la exposición.

Este año por este pequeño nudo de comunicaciones en miniatura circularán reproducciones de todos los trenes AVE que desde 1992 llegan a Sevilla procedentes de Madrid, Barcelona, Valencia y Málaga por la línea de Alta Velocidad.

Es fácil reconocer, además del AVE 100 de Alsthon, el 102 y 112 de Talgo, conocido popularmente como Pato y el 103 de Siemens, modelo Velaro. También habrá en circulación sobre las pequeñas vías de modelismo el Talgo 103 Alvia, el Caf 121 y los Avant serie 104.

Detrás del liliputiense nudo ferroviario hay 10.000 horas de montaje para cuatro circuitos generales y uno de vía métrica. La intención de la Asociación Sevillana de Amigos del Ferrocarril es representar la evolución del ferrocarril en España desde el siglo XIX hasta el XXI. Hay una zona con vía única y traviesas tipo madera, con señales mecánicas de brazos semafóricos por el que circulan, automáticamente, cuatro trenes con tracción vapor, dos en cada sentido, que se cruzan en las estaciones.

La decoración está tan cuidada que se incluyen las minas y los poblados del tipo de Riotinto, sin que falte el depósito de locomotoras de vapor, con la placa Giratoria correspondiente y la grúa para la carga de mercancías. En el ambiente del siglo XIX también hay un lago con la presa correspondiente. "El oleaje de las aguas por el viento dominante se consiguió pintando de azul un panel y colocando encima un cristal de los utilizados en las ventanas de los cuartos de baño", explica Miguel Cano, presidente de la asociación de Amigos del Ferrocarril.

El Circuito del siglo XX, tiene un mayor desarrollo, con vía doble electrificada y dotado de señales de focos luminosos, que permiten la circulación de trenes en ambos sentidos y pueden cruzarse en los trayectos entre estaciones. La variedad de trenes aquí es mucho mayor al poder circular tanto locomotoras eléctricas como diésel, junto a automotores de todos los tipos.

Por último, el circuito de Alta Velocidad es el más exterior, para contar con los mayores radios de curva y permitir las velocidades correspondientes. Según Miguel Cano, "contar con una maqueta a Escala HO permanente, nos ha permitido continuar y mejorar la campaña Conoce el Tren dedicada a acercar este medio de transporte a los escolares".